Después de tres años de montañas rusas, el Real Madrid y el Barcelona, dos gigantes del fútbol mundial, han vuelto a la cima y prometen mantener un pulso por el título de LaLiga, que arranca el viernes.
Tras un mercado muy activo en las oficinas de Madrid y Barcelona, ambos equipos deberán empezar a responder a las expectativas de los aficionados desde este mismo fin de semana.
En una temporada atípica, interrumpida por el Mundial de Catar (20 de noviembre al 18 de diciembre), muchos jugadores tendrán la mente puesta en llegar en forma a la cita internacional, pero antes deberán responder en uno de los campeonatos más exigentes de Europa, en el que muchos jugadores internacionales aterrizan por primera vez.
El Barça, con una deuda de 1.350 millones de euros (1.358,7 millones de dólares), ha logrado a pesar de ello fichar a jugadores de primer nivel, teniendo que vender activos presentes y futuros del club y firmando patrocinios que le garantizase la liquidez necesaria para lograr reforzar la plantilla.
Lewandowski y Benzema, duelo de goleadores
Uno de los recién llegados a la ciudad condal es el polaco Robert Lewandowski, que cumplirá 34 años este mes y que desembarca en Cataluña para servir de guía a las jóvenes promesas del Barça, después de ocho temporadas brillando en el Bayern de Múnich.
Será el principal rival en la tabla de goleadores del francés Karim Benzema, que arrasó el campeonato español y la Liga de Campeones la pasada temporada gracias a sus goles, y que ha empezado el curso anotando un tanto en la Supercopa de Europa (2-0 contra el Eintracht de Fráncfort) el miércoles en Helsinki.
Además del polaco, el marfileño Franck Kessié (llegado libre del AC Milan), el danés Andreas Christensen (también libre procedente del Chelsea), el brasileño Raphinha y el defensa francés Jules Koundé han reforzado las filas del Barça.
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“Es una nueva era de esplendor”, anunció Joan Laporta, presidente del club blaugrana, a principios de agosto.
Pero a escasas horas para el inicio del campeonato, el Barça necesita liberar masa salarial para poder inscribir a todos los nuevos fichajes antes del primer partido de la temporada del sábado (19h00 GMT) en el Camp Nou contra el Rayo Vallecano.
El Atlético y Sevilla, al acecho
Incluso, a pesar de las nuevas caras, no será fácil arrebatar la corona española de las manos del Real Madrid. La “Casa blanca”, con un nivel de eficacia impresionante desde la vuelta de Carlo Ancelotti el año pasado, ganó todos los títulos posibles en 2022 salvo la Copa del Rey.
En el mercado, después de superar el culebrón de Mbappé, el Real Madrid se reforzó con Antonio Rüdiger (llegado libre del Chelsea) y con la joven promesa del Mónaco, Aurélien Tchouaméni, por el que los merengues gastaron 80 millones de euros (82,1 millones de dólares), el fichaje más caro del equipo desde Eden Hazard en 2019.
Precisamente, el belga parece haber dejado sus lesiones atrás, y prometió a los aficionados durante la celebración por la victoria en Liga de Campeones el pasado mes de mayo, de dar lo mejor de sí mismo esta temporada.
A la sombra de los dos gigantes, otros equipos se mantienen al acecho. El Atlético ha pasado un mercado muy tranquilo, pero ha logrado reforzarse de manera discreta. Al regreso después de sus cesiones de Álvaro Morata, de la Juventus, y Saúl Ñíguez, del Chelsea, se suma la llegada del experimentado Axel Witsel como agente libre y del argentino Nahuel Molina, fichado por 20 millones de euros (20,5 millones de dólares) al Udinese.
Antoine Griezmann, protegido por Diego Simeone, deberá encontrar su mejor nivel para llegar en forma a la cita de Catar.
El Sevilla, que ha perdido a los defensas Jules Koundé y Diego Carlos en este mercado, ha fichado al brasileño Marcao por 14 millones de euros (14,37 millones de dólares), procedente del Galatasaray, y ha conseguido la cesión del lateral izquierdo Alex Telles (del Manchester United) y al centrocampista Isco, que después de terminar contrato con el Real Madrid regresa a su Andalucía natal.
Las cartas están repartidas y la partida puede comenzar: la ambición del Barça se mide a la sed de victoria del Real Madrid bajo la atenta mirada de otros candidatos que buscarán castigar los fallos de los dos grandes en una nueva y emocionante temporada de LaLiga.
Fuente: El Nuevo Siglo