El Sevilla encarrila la eliminatoria de 16ª de final de la Europa League tras tumbar al Dinamo de Zagreb en una primera parte de locura. En ella se marcaron los cuatro goles, condensando tres de ellos en los cuatro minutos finales. Comenzó el bloque hispalense golpeando cerca del cuarto de hora de juego y lo hizo desde los once metros: penalti sobre el Papu y Rakitic no perdona desde el punto fatídico. Las riendas las seguía llevando el conjunto de Lopetegui pero Orsic, en el 41′, aprovecha un fallo de Diego Carlos para controlar dentro del área y fusilar a Bono por el palo corto.
Y el Sevilla, que se crece como ninguno ante su público y en su competición fetiche, reaccionó de la mano de Ocampos dos minutos después. Enganchó el extremo de Quilmes una volea picada en el área tras un centro por la derecha. Y un minuto después él mismo recuperó la pelota para montar la contra que acabaría con el tanto de Martial, que se estrena como goleador sevillista, y la locura en el Pizjuán. Tras el descanso buscó la reacción el Dinamo pero Bono hizo la parada de la jornada tras un cabezazo de Lauritsen. Los minutos pasaron y el Dinamo se fue apagando mientras los locales dominaban a su antojo. Tiempo hubo para regalarle una ovación a Jesús Navas, que jugó los minutos finales tras estar parado por lesión durante tres meses. La malas noticias las dejaron Rekik, lesionado antes del descanso y Diego Carlos que acabó con molestias.
Fuente: AS