Es esa época del año donde la emoción de las fiestas ha concluido, la emoción del año nuevo se ha desvanecido, aún no es primavera, y todas sentimos que la temporada de preparación de impuestos está ardiendo. Es correcto, mientras abril 16 llega (aka la fecha límite para realizar tu declaración de impuestos), muchas de nosotras está luchando con preparar nuestros impuestos, y tal vez más importante, muchas de nosotras está trabajando duro para asegurar que no arruinemos las cosas este año.
A menos que realmente seas buena con los números, hayas estudiado contabilidad o trabajes para el IRS, los impuestos pueden ser realmente confusos y aburridos. Pero las buenas noticias es que puedes dominar los sin arruinarlos, y todavía mejor, puedes hacerlo mientras también disminuyes el estrés. Como CNBC informa, de acuerdo con Geoffrey S. Cable, director general de Destination Wealth Management, el truco está en empezar antes. Que es perfecto porque estamos iniciando marzo, y aún tienes tiempo.
La dedicación a los impuestos es importante
Él argumenta que: “Deberías de pasar tanto tiempo preparando tus impuestos como lo haces cuando planeas tus vacaciones familiares. Del mismo modo que juntas folletos, buscas gangas en línea o discutes destinos con tu esposo, debes reunir la información relacionada a impuestos en el transcurso del año, no justo antes de la fecha límite del plazo”.
Luego, necesitas entender lo básico del sistema de impuestos. Investopedia explica, en términos sencillos: “Se necesita que los ciudadanos informen y paguen impuestos de todos los ingresos que han ganado en el año. Regalos como herencias y becas no están consideradas en esta categoría. El sistema de impuestos de EE.UU es progresivo, lo cual significa que mientras más ganas, más impuestos tienes que pagar. Tus ingresos totales son conocidos como ingresos brutos”.
El gobierno
Así que cuando presentas tus impuestos, estás contabilizando cuánto ya has pagado al gobierno a lo largo del año (normalmente los empleadores retienen dinero de cada cheque de pago para el pago de impuestos), y luego descifras si debes más, o te deben un reembolso basado en tu situación financiera y de vida. Una vez que ya estés equipada para la preparación de impuestos y hayas apartado una cantidad de tiempo adecuada, entonces es hora de organizarse.
Mientras más organizada seas, es menos probable que cometas errores simplemente porque tienes prisa, pasaste por alto detalles importantes o estés abrumada. Asegúrate de tener todos los papeles financieros en su lugar, que incluyen tu W-2 (la forma donde tu empleador informa de tu salario anual y los impuestos que ya has pagado) y tu 1099 (si eres una empleada por contrato en vez de una empleada con un salario).
La ayuda con los impuestos
Si no estás segura de qué formas necesitas, puedes hacer referencia a las herramientas en línea o hablar con un contador. Esta es especialmente una buena idea si tus impuestos son un poco más complicados que una simple declaración de impuestos. ¿Cómo sabes si eso aplica para ti? Como Cosmo informa, la CEO de LearnVest, Alexa von Tobel, explica que tus impuestos son simples: “Si eres una empleada estándar con salario sin opciones para comprar acciones o de asociaciones que no hacen freelance aparte.
No eres propietaria de una casa y actualmente no estás planeando un cambio de vida importante”. Si eso describe tu situación actual de vida, entonces prácticamente puedes presentar tu declaración por cuenta propia y sin necesidad de ayuda exterior. Si sí tienes una situación financiera más complicada, entonces quizá quieras reclutar algo de refuerzos en forma de un contador o asesor fiscal.
Los aspectos vitales
Aunque la mayoría de nosotras sabe que tenemos que pagar impuestos de nuestro salario (o de cheques de pago si eres una freelancer), tal vez olvides que también necesitas pagar impuestos de tus inversiones, que es llamado impuesto sobre las ganancias de capital, y también de tu propiedad, si tienes una casa. Asegúrate de que tú contabilices todos tus ingresos así como tu situación de vida. ¿Tuviste un bebé recientemente? ¿Te casaste?, etc.
En cuanto a las herramientas en línea, hay montones de programas de impuestos y sitios web a tu disposición para que presentar tus impuestos por cuenta propia sea simple y libre de estrés. Y recuerda, estos programas son desarrollados para ayudar a las masas a presentar su declaración de forma correcta, legal y a tiempo. Así que son diseñadas para ser simples para los usuarios, no confusas.
No tienes que preparar solo
Por ejemplo, Turbo Tax es una herramienta que completa la forma por ti en base a cómo contestas algunas preguntas claves. “TurboTax funciona como una entrevista—preguntamos cuestiones fáciles de responder sobre tu vida, que afectan tu situación de impuestos (como, ¿estás casada? ¿Tienes hijos?) y llena las formas correctas tras bambalinas”. También tiene agentes disponibles para responder tus preguntas y ayudarte a lo largo del camino, y revisan tu trabajo para que tu declaración de impuestos sea precisa, y te tengan cubierta en caso de que comentas algunos errores (oye, eres humana).
De nuevo, mientras más organizada seas en cuanto a los documentos que necesitas y a las fechas límites para presentar esos documentos, más control sentirás que tendrás, y será más probable que tengas todo terminado a tiempo y sin entrar en pánico por estar olvidando algo. Comienza ahora, pregunta, no seas tímida, y haz tu investigación. Los impuestos puede que no sean divertidos, pero son importantes, y si quieres asegurarte de que no los arruinarás, y no los dejarás que arruinen tu vida, necesitas empezarlos hoy.
Fuente: Mundo Hispanico