Con la llegada de la pandemia de covid-19, en el 2020, muchas empresas tuvieron que cerrar, despedir empleados y otras apretarse el bolsillo en muchos aspectos. Entre tanto, unas pocas se mantuvieron o se reinventaron para continuar en el mercado.
EL NUEVO SIGLO dialogó con el CEO de una de estas empresas de comida, que no solo salió a flote, sino que creó y generó empleos durante los confinamientos.
“El objetivo fue crear un emprendimiento especializado en un modelo de negocio que se llama cocinas ocultas”, afirmó Juan David Jaramillo, CEO de Muncher, una compañía de venta de comida a domicilio que inició operaciones en Colombia en abril de 2019.
“La idea nació luego de tener por varios años un restaurante de comida saludable. Después de tanto tiempo empecé a ver diferentes opciones para escalar en este negocio y comencé a investigar alrededor del mundo qué oportunidades existían y precisamente escuché sobre este modelo que venía tomando mucha fuerza”, afirmó Jaramillo.
“En ese momento decidí que en lugar de crecer en el negocio de comida saludable, podía empezar con una empresa nueva que se dedicara al negocio de las cocinas ocultas”, añadió.
Sin duda optar por reinventarse no fue un salto al vacío para este emprendedor colombiano; por el contrario, fue la mejor decisión para crecer, generar empleo y convertirse en un ejemplo de cómo sacar provecho en las adversidades.
La empresa nació con otros dos fundadores: Andrés Villarraga, encargado de estrategias de expansión, y Nimrod Molad, dedicado a la creación de marcas.
“Cuando decidimos empezar Muncher, lo hicimos desde cero. Hoy en día contamos con cuatro marcas que se especializan en domicilios. Una de ellas es Franco Cocina Honesta, comida saludable; Nimis, comida del medio oriente; Oh My, sándwich, y Mooi, heladería.
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Empleos
“Este es un modelo que genera muchas oportunidades de trabajo, así como en primeros empleos para jóvenes. Por ejemplo, hemos tenido hasta 1.000 personas operando en estos tres años. Además, cerca del 60% de los empleos son de personas menores de 30 años, y el empleo para hombres y mujeres es equitativo”. Según Jaramillo por cada cocina nueva se generan aproximadamente ocho empleos directos.
¿Cómo funcionan las cocinas ocultas?
“Nosotros construimos nuestras cocinas de una manera diferente ya que lo hacemos en contenedores marítimos. Los que usamos son de segunda mano, los compramos a las navieras que los desechan y les damos una segunda vida, se hacen las adecuaciones necesarias, dejando así una cocina totalmente equipada que cumple con toda la normatividad de cualquier otro tipo de restaurante”, dice el empresario.
“Hay un componente medio ambiental muy interesante en lo que hacemos. Si un contenedor no tuviera un segundo uso, tendría que chatarrizarse, fundirse para darle un provecho adicional, y eso requiere más de 400 kilovatios por hora, que es lo que necesitarían cuatro familias de cuatro personas en Latinoamérica para vivir durante un año completo. Cuando decidimos darle una segunda vida se ahorra esa energía y con esto aportamos nuestro ‘granito de arena’ para mitigar el impacto medioambiental”, añadió.
Estos contenedores son fáciles de instalar en cualquier predio de diferentes características; algunos, por ejemplo, están en parqueaderos y otros en lotes independientes; ahí instalamos este conjunto de contendores (entre cinco a 10).
Cada contenedor es una cocina y en esos espacios “montamos nuestras marcas y también alquilamos a otros restaurantes. Es decir, tenemos dos líneas de negocio, uno inmobiliario cuando arrendamos a terceros y el otro cuando montamos cocinas para nuestras marcas”.
De otro lado, de acuerdo con Jaramillo, los arriendos varían dependiendo de la ciudad y la ubicación dentro de la misma y oscilan entre $1.800.000 y $3.500.000. Este valor también depende del tamaño del contenedor, hay algunos de 15 metros cuadrados y otros de 30 metros cuadrados.
El reto de emprender
Hay muchos retos de emprender en general y no solo en Colombia. “Tomar la decisión de montar tu propio negocio, conseguir la plata que se necesita para crearlo y después tener el personal necesario y capacitado que te apoye en el proyecto, es un reto importante. Además, en nuestro caso, el hecho de tener comida que sea estándar y que mantenga la calidad y los niveles de servicio, es otro reto significativo”.
“Estos son negocios en donde hay que cuidar cada centavo, para que el margen de rentabilidad sea bueno y así obtener los resultados esperados”, aseguró este emprendedor.
“Nacimos un año antes de la pandemia, lo cual fue un buen momento porque este era un modelo que apenas estaba llegando a Latinoamérica. Nosotros fuimos de los primeros proyectos que se iniciaron en la región y durante este tiempo aprendimos lo necesario. Fue un año en donde empezamos a contactar a varios restaurantes y clientes para presentarles el modelo de negocio de cocinas ocultas”, dijo Juan Jaramillo.
Agregó que “ese primer año (2019) fue de aprendizaje con un crecimiento muy lento, pero cuando llego la pandemia, un año después, estábamos preparados para la demanda, que se incrementó de manera exponencial. Esto debido a que en los primeros meses de confinamiento en Colombia y en todo el mundo, la única manera de comer de manera diferente a tener que preparar la comida en casa, era pedir domicilios”.
De acuerdo con Jaramillo, muchas personas que antes no pedían domicilios se dieron cuenta de que se puede tener una buena experiencia con este tipo de comida. “Precisamente nosotros nos hemos especializado en eso y así hemos potenciado mucho nuestro negocio”, añadió.
Considera que no necesariamente la pandemia ayudó a mejorar la rentabilidad, pero indiscutiblemente fue determinante para tener un mercado mucho más grande y que además confiara en la comida a domicilio y que tomara la decisión de escoger un restaurante que no conocía.
Lo más gratificante
“Hay muchas cosas que me llenan de orgullo y de felicidad y me motivan a continuar, entre ellas el impacto de poder generar nuevos empleos. Esta es una de las principales razones por las cuales creamos esta empresa. Queremos ayudar a muchas personas a tener trabajo y llevar comida a su casa y eso lo hemos logrado con este modelo de negocio”, expresó Juan David Jaramillo.
“Otro punto gratificante es que al traer un modelo nuevo, te empiezan a ver como punto de referencia de lo que va pasando alrededor de estas tendencias. Aún estamos aprendiendo, pero somos pioneros y eso permite ayudar a otros restaurantes que quieren montar sus negocios”, sostuvo el empresario.
Actualmente Muncher cuenta con 400 cocinas en 42 locaciones, en 11 ciudades de cuatro países de América Latina (Colombia, Brasil, México, Ecuador y Perú).
Fuente: El Nuevo Siglo
