Julio Erazo cantante y compositor de más de 350 canciones falleció a sus 92 años en Magangué, Bolívar, sin embargo, el maestro dejó un legado de ritmos, grupos musicales y canciones emblemáticas que lo mantendrán vivo en la memoria de los colombianos.
Porros, tangos, paseos, merengues, boleros y hasta ranchera fueron algunos de los ritmos en los que incursionó el compositor y aunque la gran mayoría lo conoce por “Adonay” uno de sus más grandes éxitos, fueron varias las canciones las que compuso el barranquillero y que vale la pena recordar.
“Lejos de ti”, un tango compuesto por él, inspirado en su esposa Elides Martínez e influenciado por los repetitivos cantos que su mamá solía expresar, es un poema que nació a orillas del Magdalena y que hoy es una de las canciones más populares y sentidas del país.
“Hoy que la lluvia entristeciendo está la noche, y las nubes en derroche tristemente veo pasar, viene a mi mente la que lejos de mi lado el cruel destino ha posado solo por verme llorar. Y a veces pienso que es tal vez mi desventura, la causa de esta amargura que no puedo soportar. Quiero estar al lado de ella, para decirle que es bella, para decirle que nunca podré dejarla de amar”, dice la letra de la canción que evoca las palabras que pronunció algún día en tiempos juveniles a causa de su desesperación por la aprobación de los padres de quien sería luego su esposa.
“Adonay” alude a otro idilio frustrado, de tantos que tuvo el compositor, este es un tema que corre por la sangre de millones de colombianos cada que llega diciembre y que encierra una increíble historia de amor, una relación con el maestro Julio Erazo Cuevas, quien compuso esa letra y la inmortalizó, seguramente sin imaginarlo.
“La pata pelá”, huella perenne de las crecientes del río Magdalena y de las muchachas que andaban descalzas por sus riberas es otra de sus canciones más recordadas, al igual que “Hace un mes” disco de oro con Los Corraleros en 1967 , “Compa’e Chemo” y “La puya guamalera” entre otras.
Erazo fue integrante de “Los Corraleros de Majagual”, para los que llegó a componer alrededor de cincuenta canciones y con quienes estuvo presente por lo menos en diez álbumes. También, cantó al lado de Edmundo Arias, Pacho Galán, Lucho Bermúdez, Los Rufinos, Andy Russell y Consuelo Velásquez.
Su versatilidad en la composición, le hicieron merecedor en 2017, del Premio Nacional Vida y Obra, “un reconocimiento a la diversidad de las músicas de acordeón del Caribe colombiano, al gran juglar y maestro de generaciones, con profunda incidencia en múltiples géneros musicales. Es un profundo, innovador en ese universo rítmico plural de la Colombia festiva que le da potencia a las expresiones culturales de las sabanas caribeñas”, decía el acta del jurado emitida el Ministerio de Cultura.
Fuente: La Republica