Una líder proaborto entre las 100 personas más influyentes del mundo

Pro aborto, pionera de Causa Justa (el movimiento que logró la despenalización del aborto hasta la semana 24), médica, exdirectora Nacional de Salud Pública, cofundadora de La Mesa por la Vida y Salud de las Mujeres, y colombiana (de Medellín), así definen a Ana Cristina González Vélez, una de las 100 personas más influyentes del mundo en 2022, según la lista anual de la revista TIME.

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Es una de las tres mujeres de Latinoamérica que figuran en la publicación, y comparte espacio con presidentes como Joe Biden y Volodímir Zelenski, entre otros. González está en la categoría ‘Pioneros’.

Pero, ¿Cómo llegó a ser una de las pioneras de Causa Justa por el aborto legal? Qué la posiciona como una líder ante el mundo. Portafolio habló con ella.

¿Desde cuándo viene ese espíritu de líder?

Creo que siempre he sido un poco directa y rebelde. Me acuerdo que una vez me echaron de un colegio porque yo era una líder negativa; organizaba a la gente y hacíamos bobadas. Mi mamá le dijo a la profesora: “¿Cómo así que una líder negativa? No conozco eso. Si mi hija es una líder negativa debe ser que es muy buena; si ustedes como profesoras no la pueden controlar. Me la llevo de este colegio”.

¿Cómo empezó en el activismo?

Cuando entré a la universidad tenía muchas indignaciones frecuentes, las más grandes empezaron cuando vi Ginecoobstetricia, una materia que tenía que ver con salud reproductiva.

A nosotras no nos enseñaron nada sobre métodos anticonceptivos, no me enseñaron ¡nunca! a poner un dispositivo intrauterino. A esas clases nunca llegaba el profesor. Los abortos eran terribles, se hacían como legrados. A las mujeres las trataban horrible. Ahí me empecé a enfurecer y discutir.

La sensación de injusticia e indignación se juntaron con la posibilidad de conocer colectivos de mujeres en Medellín y empezar a hacer activismo feminista.

En la universidad, ¿alguna situación la impactó para unirse más al activismo?

Sí, a nosotras nos tocaban los casos de las mujeres que llegaban sangrando. Porque como no podían abortar, todas lo hacían ilegalmente. Yo tuve una experiencia, que recuerdo borrosa, de una mujer que llegaba y los médicos querían llamar a la policía, y varios de nosotros furibundos porque nos decían: “ustedes están de acuerdo con un delito”. Sentía impotencia, sobre todo indignación.

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Ya conformada la Mesa por la Vida, habían muchos casos de niñas, indígenas, migrantes, mujeres muy pobres o con muchos hijos, que habían llegado al hospital con 12 semanas a abortar, y las mandaban para todo lado. Ya cuando regresaban a la Mesa tenían 20 o 22 semanas e historias muy trágicas; mujeres que se devolvieron a tener esos hijos que no querían, incluso resultados de violación.

El día de la decisión de la Corte (21 de febrero, 2022) sentí un alivio al pensar: “ayudamos a corregir esto”. Es que la corte en el 97 decidió que era constitucional penalizar a las mujeres, incluso cuando las habían violado. La decisión es para mí como el faro, la esperanza de que se puede hacer algo, nos tomó 25 años.

¿Siente que esa fuerza de liderazgo viene de casa?

Nunca lo pensé. Pero, sin duda tiene un empuje. Yo llevo muchos años liderando procesos, siempre con trabajo colectivo, y me cargo cosas bien complicadas, entonces, creo que sí hay mucho de esa fuerza de “yo puedo” o “hay que hacerlo”.

Mi mamá trabajó toda la vida porque tuvo tres hijas sin tres papás, entonces, fue siempre una mujer empoderada, que trabajó independiente y se defendió sola; y mi tía, que tuvo 6 hijas.

Las mujeres de esa generación, yo creo que lo que más podían hacer era luchar por su autonomía económica, mucho más que por la de su cuerpo.

¿Qué consejo le daría a los jóvenes líderes?

Yo diría que el miedo hay que dejarlo guardado en una cajita, porque no hay nada más potente que la sensación de libertad, poner la cara, construir y contribuir a tener una sociedad más justa y más democrática, como yo creo que nosotras hemos ayudado a lo largo de estos años.

Nunca me hice la pregunta, ¿será que lo podré hacer?Sino ¡Hay que hacerlo! Nunca me pregunté en esa época cuánto nos íbamos a demorar, y visto en perspectiva, varias de las viejas amigas me decían: es muy poco tiempo, pero si sumas el día a día, son 25 años de batallar.

En la lista de TIME también se encuentra Cristina Villareal, quien con González son las pioneras de Causa Justa y cofundadoras de La Mesa por la Vida y la Salud de las Mujeres. Así como David Velez, CEO de Nubank (Colombia), Gabriel Boric, presidente de Chile; Sônia Guajajara, líder indígena (Brasil), Tulio de Oliveira, científico (Brasil). Un total de 6 latinos, 3 de ellos, colombianos.

LEYDI PERDOMO

Escuela ET

Fuente: Portafolio