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Crónica Hispano Pega Padres. Enfurecido les pega con una escoba.

  • Crónica: Hispano enfurecido les pega a sus padres con una escoba
  • Raúl Vega es un joven muy violento de acuerdo con las autoridades
  • Desde que era menor edad, ‘Raulito’ ha sido un dolor de cabeza para todos

Crónica: Hispano enfurecido les pega a sus padres con una escoba: “Cría cuervos y te sacarán los ojos”, reza un viejo proverbio que se refiere a seres mal agradecidos que terminan pagándole mal a alguien que solo le había hecho bien. Y todo indica que este es exactamente el caso de Raúl Vega, un joven de ascendencia latina que reside en Georgia.

‘Raulito’ como le llaman de cariño sus allegados, acaba de ser arrestado por las autoridades del condado de Gwinnett nada más ni nada menos que, por pegarle y muy duro, a la pareja que le dio la vida, a sus dos progenitores, esos que lo trajeron a este mundo y a quienes en teorías debería de cuidar, honrar y respetar.

Crónica: Hispano enfurecido les pega a sus padres con una escoba: ¿Cómo y cuándo se comenzó a descarrilar?

Archivo/MH

Raúl nació en un hospital de la ciudad de Atlanta el 11 de junio de 1998. Ese día, seguramente todo era felicidad en su hogar, pues no hay mayor dicha para una familia que la llegada de un recién nacido. Los padres ni los hermanos mayores de Raulito se imaginarían que en la adolescencia se iba descarriar.

Desde antes de cumplir la mayoría de edad, el chico ya daba muestras de tener una conducta irregular. Le gustaba hacer locuras en las calles cuando estaba tras el volante del vehículo que, con mucho amor y sacrificio le habían dado sus papás, al punto que el Estado se vio en la necesidad de suspenderle su licencia de conducir.

Crónica: Hispano enfurecido les pega a sus padres con una escoba: De repente comenzó a tornarse agresivo

El hispano que pega a sus padres de repente comenzó a tornarse agresivo
Raúl Vega en su más reciente arresto el pasado domingo. (Oficina del Alguacil del condado de Gwinnett)

Raúl tiene ahora 24 años, pero ha estado en la cárcel media docena de veces, la mayoría de ellas por agredir a otras personas. La primera vez que pisó una fría celda fue justo unos días después de cumplir la mayoría de edad (18 años). Le pegó a un amigo, quien no lo pensó tanto y lo denunció para que lo metieran preso.

Además, el muchacho también ha sido arrestado por comprar bebidas embriagantes sin tener la edad reglamentaria para ello, que en Georgia es de 21 años. En pocas palabras, es muy probable que las adicciones y malas compañías, tengan mucho que ver con su mal comportamiento con los demás.

Crónica: Hispano enfurecido les pega a sus padres con una escoba: Agarró una escoba para pegarle a sus papás

Así lucía Raúl en mayo de 2018 cuando fue arrestado por violencia doméstica. (Oficina del Alguacil del condado de Gwinnett)

La Policía de Gwinnett asegura que lo último que Raúl hizo fue agredir físicamente a sus papás. Primero comenzó a pelear con su padre, a quien le propinó varios puñetazos en el rostro. Ante semejante acción, la madre de Raúl decidió intervenir y al ver que eran dos contra uno, el joven tomó la escoba y les pegó a ambos con ella.

Los dos señores no tuvieron más remedio que poner sus brazos para recibir los garrotazos y evitar así que fuera a causarle daños mayores al darles con ese palo en la cara y cabeza. La madre de Raúl logró salir de la casa y fue a pedirle ayuda a uno de sus vecinos, que ni lento ni perezoso, decidió meterse para defender a sus viejos amigos.

Crónica: Hispano enfurecido les pega a sus padres con una escoba: El vecino fue recibido a balazos

Imagen de Raúl tomada en febrero de 2017 cuando fue arrestado por violar su probatoria.(Oficina del Alguacil del condado de Gwinnett)

El vecino sabía que Raúl es un hombre violento, pero ignoraba por completo que en ese preciso instante estaba armado. Como no sabía eso, llegó con las intenciones de calmarlo por las buenas o inmovilizarlo por las malas en caso de que fuera necesario, pero el agresor no estaba dispuesto a ceder de ninguna manera.

Al ver que ya eran tres contra uno, Raúl sacó su pistola y abrió fuego en contra de su vecino, pero afortunadamente, su puntería le falló y no pudo atinarle. Fue entonces que las ahora tres víctimas decidieron que era momento de llamar a las autoridades locales para que lo sometieran antes de que matara a alguien.

La policía llegó en cuestión de minutos

Así lucía Raúl en mayo de 2016 cuando fue arrestado por agredir a otra persona durante una riña. (Oficina del Alguacil del condado de Gwinnett)

Cuando Raúl vio que estaban llegando patrullas al vecindario, sabía que la cosa era con él, por lo cual se parapetó en casa. Luego de varios minutos de negociación, el agresor optó por entregarse de manera voluntaria y pacífica antes de que la situación fuera a escalar, así que decidió salir con sus manos en alto.

Fue arrestado en el acto y recluido a la prisión de la localidad bajo dos cargos de agresión simple y uno más de asalto agravado. Las primeras acusaciones son consideradas delitos menores, por lo cual le impusieron una fianza de 2,600 dólares, pero por la última es una felonía, por la cual le negaron en privilegio de salir bajo libertad condicional.

¿Será que estaba intoxicado o endemoniado?

Así lucía Raúl en marzo de 2016 cuando fue arrestado por comprar licor sin tener la edad reglamentaria para ello. (Oficina del Alguacil del condado de Gwinnett)

Este suceso triste ocurrió a tarde del pasado domingo en la localidad de Buford, donde residen tanto las víctimas como su agresor. En lo personal pienso que atacar sin piedad a sus padres, es una acción desmedida que alguien en su sano juicio no es capaza llegar a cometer. Tiene que estar mínimo intoxicado con alguna sustancia.

La policía no ha revelado si encontraron algo raro en el organismo de Raúl, lo cual no me extrañaría. En el peor de los casos, sino hallan nada, es porque estaba con el demonio adentro, lo cual tampoco sería raro. Y es que tristemente, hoy en día abunda la gente endiablada buscando con quien desquitar sus rabias y frustraciones. Gracias por leer mi crónica de hoy en El Papayaso. Hasta la próxima.

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Fuente: Mundo Hispanico