El ‘dólar Catar’ y el ‘dólar Coldplay’ es la nueva incorporación a la jerga del control de cambios en Argentina, al entrar en vigor aumentos de impuestos a la compra de divisas para los gastos de turistas en el exterior o para espectáculos.
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Desde hace casi 100 años y de forma intermitente, en Argentina funcionan restricciones a la compra de divisas. El más reciente sistema de control de cambios se estableció en 2019, con una tasa oficial que actualmente alcanza los 157 pesos por dólar. Pero el mecanismo no alcanzó para contener la demanda de dólares y, ante la escasez, en el mercado legal surgieron una docena de tipos de cambio destinados a sectores de la economía o transacciones que requieren divisas.
Pero de todos los sobrenombres que ha incorporado el billete verde en Argentina, el más conocido es el ‘dólar blue’ que se transa en el mercado paralelo o ilegal. ‘Dólar soja’, ‘mayorista’, ‘contado con liqui’, ‘Catar’ o ‘Coldplay’, son algunos de los participantes del mercado cambiario.
Ante un nivel crítico en las reservas internacionales y como estímulo a las exportaciones agrícolas, la principal fuente de divisas de Argentina, el gobierno aprobó este año un régimen transitorio para la liquidación de la cosecha de soja, que arrojó un tipo de cambio de 200 pesos por dólar. En vigor durante solo 25 días de septiembre, permitió que ingresaran a las reservas del Banco Central más de US$7.600 millones por ventas de granos a esa cotización.
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Alude al próximo Mundial de fútbol. Será el tipo de cambio que se aplicará a los gastos con tarjetas de crédito que superen los US$300 mensuales. Se calcula cargando a la cotización oficial tres diferentes impuestos, de 30%, 45% y 25%. Está en 314 pesos. Su creación responde a la decisión de “cuidar” los dólares obtenidos por el Estado sobre las ventas de soja.
Según cifras oficiales, en los últimos dos meses el sector turismo presenta un déficit de más de US$1.500 millones, y el gobierno teme que la cifra crezca por los viajes al Mundial entre noviembre y diciembre, y las próximas vacaciones del verano.
Es el tipo de cambio para las importaciones de bienes suntuarios como yates, jets privados o piedras preciosas. Vale lo mismo que el ‘dólar Catar’.
Se refiere a la tasa para pagar ingresos a espectáculos internacionales como los conciertos de la banda británica Coldplay, que se presentará a fines de octubre en el estadio Monumental de Buenos Aires. Se calcula sumando un impuesto de 30% al tipo de cambio oficial, lo que implica unos 204 pesos por dólar. Irónicamente, no serán las entradas para Coldplay las que se pagarán a ese precio, pues se agotaron hace meses.
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En el mercado operaban varias paridades cambiarias como el ‘dólar mayorista’ para transacciones interbancarias, el ‘dólar contado con liquidación’ y el ‘dólar bolsa’, de operaciones bursátiles en Buenos Aires y en Nueva York, o el ‘dólar ahorro’, para atesoramiento y con un límite de compra de US$200 mensuales.
El abanico responde al intento del gobierno de evitar un salto devaluatorio, de consecuencias impredecibles por la inflación, proyectada por encima de 90% este año.
AFP
Fuente: Portafolio