Continúa la consternación por el caso de linchamiento de Hildebrando García Rivera, conductor de un camión asesinado a golpes momentos después de arrollar a una mujer indígena y a su bebé en la vía que comunica a Funza con Siberia.
El ataque, que ocurrió la noche del martes, cuando García Rivera, adscrito a una empresa de recolección de basuras, «arrolló a Ermilda Tunay, de 36 años, y su hija Sara Camila García, de un año y nueve meses (…) quienes desafortunadamente fallecieron», según detalló la Secretaría de Gobierno de Bogotá en un comunicado.
Tras el accidente, «un grupo de indígenas llegó al lugar» y «en un acto de intolerancia que rechazamos agredió al conductor del camión identificado como Hildebrando García, de 60 años», detalló la Secretaría.
García Rivera fue trasladado a un centro médico con «trauma craneoencefálico» y «lesiones en el tórax» que le causaron la muerte.
Imágenes divulgadas en redes sociales muestran el momento en que una muchedumbre obliga al conductor a bajar del vehículo -que ya está visiblemente dañado- para luego golpearlo con palos en el suelo en presencia de varios policías de tránsito.
«Él pidió ayuda (por WhatsApp), dijo que le estaban rompiendo» el vehículo, relató a W Radio Ricardo Rodríguez, cuñado del difunto conductor.
El audio
El audio al que justamente hizo referencia Ricardo Rodríguez fue revelado y en él se puede oír el momento exacto en el que García le expresa su temor al gerente de la empresa de aseo donde trabaja mientras es atacado su vehículo.
“Dios mío, acabaron con el carro. Papito Dios esto es un accidente, Dios mío. Van a acabar el carro, ayúdenme”, dijo el conductor.
A propósito de la situación, el gerente de la empresa de aseo Ecosiech, Mario Calderón, aseguró que después de recibir la llamada, se comunicó con una técnica operativa que le aseguró que tras marcar al teléfono de Hidelbrando, alguien le contestó y le dijo “No llame más a este hp que lo vamos a matar’, y le colgaron”.
Tiempo después se confirmó la muerte del conductor.
¿Qué dicen los expertos?
Expertos penalistas como el abogado Francisco Bernate aseguran que las personas que asesinaron al conductor deben responder ante la justicia ordinaria y no ante los jueces de sus comunidades.
“Este tipo de hechos deben ser juzgados por la justicia ordinaria”, porque los victimarios “han demostrado que son un peligro para la comunidad”, así como no reconocer “la autoridad de la institucionalidad colombiana”, acudiendo a la justicia por mano propia.
Los Emberá en Bogotá
La madre -quien según los comuneros estaba en embarazo- y su hija pertenecían al pueblo Emberá Katío, un grupo indígena que en septiembre del año pasado se tomó el Parque Nacional de Bogotá para protestar por el retiro de un subsidio que costeaba sus gastos de alojamiento en la ciudad, adonde llegaron desplazados por la violencia.
A finales de 2021, decenas de ellos aceptaron ser trasladados a una instalación oficial a las afueras de la ciudad, cerca del sitio donde Tunay y su hija fueron atropelladas.
Los indígenas aseguran haber llegado a Bogotá huyendo de enfrentamientos entre grupos armados que se disputan desde hace varios años las rentas del narcotráfico y la minería ilegal en el selvático departamento de Chocó (oeste), de donde es originario el pueblo Emberá Katío.
Mientras tanto, las autoridades distritales buscan canales de diálogo para acordar el retiro de la comunidad del parque y su reubicación.
Fuente: RTVC Noticias
