9 causas del dolor en la ingle

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El dolor en la ingle es un motivo de consulta frecuente a nivel mundial. El abordaje médico oportuno mejora el pronóstico y favorece al alivio rápido de los síntomas.

9 causas del dolor en la ingle

Última actualización: 06 abril, 2022

El dolor en la ingle es una causa común de malestar en los hombres. De igual forma, algunas mujeres también pueden presentar molestias en esta zona, asociadas al embarazo o como resultado de afecciones inflamatorias. A continuación te contamos las 9 causas más comunes del dolor en la ingle.

Las molestias en la región inguinal son resultado de problemas musculares, tendinosos, vasculares o nerviosos. Además, ciertas enfermedades en órganos internos también pueden manifestarse con algias a este nivel.

Las causas más habituales de dolor en la ingle

La ingle o región inguinal es la zona ubicada en la parte más alta de los muslos, justo en la unión con la zona púbica y el abdomen. A través de la misma discurren los ligamentos, los músculos, los nervios y los vasos sanguíneos que van al escroto y a los labios mayores de la vagina.

El dolor en la ingle puede aparecer de forma súbita, posterior a una lesión, o puede presentarse de forma paulatina en semanas o meses. De igual forma, se manifiesta como una puntada, una quemazón o una molestia persistente. Las características del dolor orientan al clínico en el diagnóstico.

1. Hernia inguinal

Las hernias inguinales se originan cuando una pequeña porción del intestino sale a través de una debilidad en la pared abdominal. Es común que la hernia siga el trayecto del conducto inguinal y pueda ser palpada a través del testículo. En casos avanzados, la hernia sale completamente y desplaza al escroto.

Esta afección es una causa común del dolor en la ingle en los hombres. Estudios afirman que el dolor es unilateral, agudo, urente y se extiende al muslo, a la zona lumbar y al escroto.

El malestar suele empeorar al toser, inclinarse hacia adelante, al cargar peso o practicar algún deporte. Otros síntomas habituales son los siguientes:

  • Molestias al caminar.
  • Bulto que sobresale en la ingle.
  • Sensación de ocupación y pesadez en la zona.

Por lo general, la principal complicación es la estrangulación de la hernia. Algunos signos de alarma incluyen fiebre, cambios de color en la zona y aumento en la intensidad del dolor. La reparación del defecto herniario se realiza de forma quirúrgica.

El dolor herniario puede ser persistente por meses, hasta que finalmente la protrusión del bulto se hace evidente.

2. Distensión muscular

La distensión muscular y tendinosa es una de las principales causas del dolor en la ingle. Es común en las personas que practican deportes de alto impacto para los miembros inferiores, como el hockey, el fútbol y el baloncesto. Este malestar suele ser agudo y empeorar con el movimiento.

En la mayoría de los casos, la distensión se presenta con tumefacción y enrojecimiento de la ingle. Además, ante un golpe directo es posible evidenciar un hematoma en la zona. Por fortuna, este tipo de lesiones tienen un alta tasa de recuperación.

El tratamiento médico se basa en el reposo y la aplicación de compresas frías en la región. De igual forma, es posible que el profesional indique analgésicos y antiinflamatorios no esteroideos (AINEs) para reducir las molestias. En lesiones graves pueden ser necesarias sesiones de fisioterapia.

3. Orquitis y epididimitis

La orquitis es un proceso inflamatorio de uno o ambos testículos. Suele ser resultado de una infección bacteriana o aparece posterior a un cuadro de paperas. En ocasiones, se asocia a la inflamación del epidídimo o epididimitis, siendo esta la región del testículo donde se almacenan los espermatozoides.

Ambas patologías se acompañan de dolor y tumefacción en la ingle y el testículo. Se presentan con fiebre, escalofríos, malestar general, náuseas y vómitos. Además, también se puede evidenciar el agrandamiento de los ganglios linfáticos en la región.

4. Procesos infecciosos

Las infecciones bacterianas a nivel de los genitales suelen acompañarse de dolor en la ingle por inflamación de los ganglios linfáticos. Tal es el caso de las enfermedades de transmisión sexual (ETS) como la sífilis y el linfogranuloma venéreo.

Estudios afirman el linfogranuloma causado por clamidia suele originar linfadenopatías inguinales dolorosas en la segunda etapa de la enfermedad. Estas infecciones requieren de tratamiento con antibióticos y supervisión continua por parte de un profesional de salud.

5. Embarazo

Es frecuente la manifestación de dolor en la ingle durante el embarazo. El mismo suele ser de mayor intensidad al principio y en el último trimestre de la gestación. Se debe a la relajación de las articulaciones de la cadera y los cambios hormonales en el cuerpo de la gestante que la preparan para el parto.

En la mayoría de los casos, las molestias en la ingle empeoran al realizar esfuerzo físico, subir escaleras, acostarse boca arriba y abrir mucho las piernas. Los profesionales recomiendan la realización de ejercicios de estiramiento y el uso de ropa interior especial para reducir la tensión en la zona.



6. Quiste de ovario

Los quistes ováricos son pequeños nódulos llenos de líquido que se forman en el interior o en la superficie del ovario. Los pequeños suelen pasar desapercibidos y no generan síntomas. No obstante, las lesiones de mayor tamaño se acompañan de las siguientes manifestaciones:

  • Dolor sordo en la parte inferior del abdomen.
  • Molestias en la ingle y el piso pélvico.
  • Sensación de pesadez abdominal.
  • Fiebre y vómitos en casos graves.
  • Hinchazón del abdomen.

El diagnóstico se basa en la clínica y en los estudios de imagen. El tratamiento depende del tamaño del quiste y su evolución, por lo que en algunos casos se mantiene conducta expectante. De igual forma, el médico puede indicar anticonceptivos orales y cirugía en caso de quistes grandes o sugestivos de cáncer.

7. Lesión del nervio ciático

El dolor originado por lesión en el nervio ciático es denominado ciática. Las causas más comunes incluyen las hernias discales y la compresión vertebral.

Estas originan molestias a lo largo del trayecto del nervio ciático, el cual atraviesa la espalda y se dirige a las piernas, pasando por la pelvis, la ingle y los glúteos.

El dolor puede variar desde una sensación de ardor o puntada hasta una sacudida eléctrica. Suele afectar un solo lado del cuerpo y se intensifica al permanecer sentado por mucho tiempo, toser o estornudar.

8. Cálculos renales

El dolor asociado a los cálculos renales es conocido como cólico nefrítico. Se produce cuando las piedras o cálculos descienden a lo largo del uréter a la vejiga y la uretra. Hay dolor intenso, orina oscura y turbia, aumento de la frecuencia urinaria y molestias con la micción.

Investigaciones sugieren que el dolor típico del cólico nefrítico se presenta en la región lumbar y se extiende como una oleada a la parte baja del abdomen, la ingle, el muslo y los genitales. El tratamiento se basa en analgésicos, antiespasmódicos, destrucción de los cálculos por litotricia y extracción quirúrgica.

Los cálculos pequeños pueden ser expulsados con la orina, pero cuando superan cierto diámetro solo queda eliminarlos con ondas de choque o extracción quirúrgica.


9. Torsión testicular

La torsión del testículo es un trastorno doloroso causado por la rotación del testículo sobre su propio eje con obstrucción del flujo sanguíneo que nutre al escroto. Esta condición es frecuente en hombres jóvenes y se presenta con dolor intenso en el testículo y la ingle.

Otros síntomas son los siguientes:

  • Náuseas y vómitos.
  • Tumefacción del escroto.
  • Molestias en la parte baja del abdomen.
  • Cambio de coloración en la piel del testículo.
  • Aumento de la frecuencia de las micciones.

Es habitual que el dolor despierte de forma súbita a la persona en la noche o en la mañana. El diagnóstico se basa en la sintomatología y la valoración por estudios de imagen.

Por otro lado, es necesario el abordaje quirúrgico para corregir la torsión. Luego de 6 horas de inicio del cuadro, aumenta la posibilidad de tener que hacer una extirpación del testículo.

Un síntoma que no debe tomarse a la ligera

El dolor en la ingle puede ser originado por una gran variedad de afecciones. Las causas más comunes en hombres incluyen la distensión muscular, las hernias, la orquitis y la torsión testicular. Por otro lado, en las mujeres este síntoma puede aparecer en el embarazo o por la presencia de quistes ováricos y ante las enfermedades de transmisión sexual.

Es indispensable acudir a consulta si se presentan molestias inguinales que no desaparecen luego de un par de días o que aumentan de intensidad. Además, la presencia de fiebre, vómitos, cambios de coloración, sudoración y pérdida de la consciencia son indicativos de una mayor gravedad.

Fuente: Mejor Con Salud