El uso de lubricantes juega un papel importante dentro de la salud sexual, ya que facilita la experimentación y aumenta el placer.
Aproximadamente 4 de cada 10 mujeres tienen alteraciones o problemas sexuales a lo largo de su vida, las cuales no necesariamente son disfunciones sexuales, pero sí afectan la calidad de vida individual y/o en pareja.
De acuerdo con un estudio realizado a más de 16 mil colombianos por la aplicación móvil Gleeden, el 60% tiene fetiches sexuales, donde el 80% son hombres; sin embargo, solo el 9% aseguró haber cumplido sus fijaciones sexuales, mientras el 67% dijo que solo han realizado una fantasía sexual.
Como cómplice erótico y para cumplir dichas fantasías, el uso de lubricantes juega un papel importante dentro de la salud sexual, pues facilita la experimentación basada en la diversión y aumenta el placer sexual evitando síntomas de sequedad vaginal o disconfort con la fricción.
La doctora Carolina González, Médica de la Universidad Ces y especialista en sexología clínica del Instituto Mexicano de Sexología (IMESEX) y de la UNED de Madrid, nos comparte algunas de las ventajas de utilizar lubricantes durante la actividad sexual.
- Mayor placer durante la penetración: en algunas ocasiones las mujeres sufren de sequedad vaginal, ya sea por la menopausia, embarazo y posparto, alteraciones hormonales o consumo de anticonceptivos entre otras causas, en este tipo de casos el lubricante, permite humedecer la zona íntima, facilitar la penetración y aumentar los niveles de placer.
- Ideales para la masturbación: cuando queremos jugar con nuestra pareja o divertirnos a solas, el lubricante facilita la estimulación del clítoris o el pene, permitiendo potencializar el clímax.
- Facilita el uso de juguetes sexuales: siempre que utilices un vibrador debe ir acompañado de un lubricante. Es importante seleccionar lubricantes que sean compatibles con el material de los juguetes sexuales, pues de lo contrario a largo plazo se podría dañar el juguete. Se recomienda utilizar lubricantes a base de agua.
- Versatilidad para distintas prácticas sexuales: hay algunas prácticas sexuales y posturas sexuales que involucran más fricción y profundidad en la penetración, por lo que requieren del uso de lubricantes para potencializar el placer durante el sexo, evitando que haya dolor y fricción. Además, son una alternativa para brindar mayor confort, diferentes texturas y sensaciones placenteras durante la actividad sexual, sobre todo cuando hay uso de preservativos. Por lo general los lubricantes de base acuosa, no afectan la calidad del látex.
De acuerdo con González: “Antes de utilizar un lubricante es importante saber su composición.Los más recomendables son a base de agua, ya que tienden a ser más naturales y por lo general son hipoalergénicos y no afectan el PH de la vulva ni de la vagina. Adicionalmente se recomienda evitar lubricantes que tengan fragancias o sabores ya que, para el caso de pieles sensibles, estos podrían ser causantes de alergias o irritaciones. finalmente, también es importante analizar la textura, para que sea suave y agradable para la piel”.
Sin embargo, cuando se trata de sexo, no hay regla ni parámetros establecidos. Lo importante es saber tener una conversación abierta en pareja, para compartir los deseos sexuales, justos y lograr una complicidad, que a largo plazo se traduzca en una relación de pareja sana, donde se puede disfrutar ampliamente del sexo.
“El erotismo y el sexo son para disfrutarlos y no para sufrirlos”, añadió la doctora Carolina González.
Fuente: Cablenoticias