No importa si no tienes un espacio de secado para la ropa en tu casa o departamento; siempre hay trucos que podemos aplicar para secar las prendas luego de lavarlas.
Quizás muchos coincidimos en que una de las tareas domésticas más engorrosas es el lavado, secado y guardado de la ropa (sin contar el planchado). Tender la ropa en una casa sin espacio o secarla en épocas de lluvia e invierno dentro del hogar representan todo un desafío.
La clave para un secado exitoso es ser prácticos y aprovechar al máximo los recursos que nos ofrece el entorno, aunque a simple vista parezca desfavorable. Queremos compartir contigo algunas ideas para que tender la ropa dentro de casa no sea un problema.
7 ideas para tender la ropa en una casa sin espacio
Además de tener una casa o departamento de dimensiones reducidas que no tenga espacio para poder tender la ropa afuera, también es cierto que cuando llueve, hay viento y hace mucho frío, colgar la ropa en el patio o la terraza es un problema.
Muchas veces optamos por tenderla dentro y, cuando menos nos damos cuenta, tenemos ropa en las sillas, los picaportes, los respaldos de las camas y lugares que nunca imaginamos que podían oficiar de tendederos. Para evitar este panorama repasemos 7 consejos que seleccionamos para facilitar el proceso de secado de la ropa dentro de casa.
1. Tendedero clásico
Empezamos con el tradicional tendedero plegable que puede o no tener brazos laterales que aumentan su capacidad. La principal ventaja es que colocamos toda la ropa en un mismo lugar y, al ser plegable, luego lo guardamos y no ocupa demasiado.
Aunque vienen de diferentes materiales, los mejores son aquellos que tienen patas de acero y varillas de aluminio. Sirven tanto para interior como exterior y son tan funcionales, que de seguro hay uno en todo hogar.
Si tienes que comprar, procura que sea extensible para que te permita tender sábanas, manteles y toallones sin problema. Alcanzan 1,90 metros sin contar los brazos laterales.
2. Tendedero de torre
Este es ideal para espacios muy reducidos, puesto que es más alto que ancho y ocupa menos que los tendederos convencionales. Se puede colocar en la ducha cuando no lo usas y tiene una excelente distribución de varillas para colgar la ropa.
3. Tendedero de balcón
Este modelo se coloca en el balcón, radiador e incluso puertas. Por su tamaño es perfecto para tender ropa interior, ropa de bebé y prendas delicadas. Una vez que la ropa está seca, retiras el tendedero y lo guardas al costado de la lavadora para que no ocupe lugar.
4. Tendedero de bañera
Tiene forma de V. Uno de sus lados se apoya en la pared del baño y el otro en el borde de la bañera. Son prácticos y no te ocupan nada de lugar. Perfectos para secar las toallas luego de utilizarlas.
5. Tendedero de pared
Este es el que se amura y, cuando no lo usas, lo cierras. El único defecto es que, al estar fijo en la pared, no puedes moverlo dentro de la casa según te convenga. Asimismo, debes asegurarte que al cerrarse quede lo más cerca posible de la pared.
6. Barrales
Esta es una idea bastante original que consiste en colocar un barral entre dos armarios, ya sea en la cocina, el baño o los dormitorios. Puede ser un barral de cortina, por ejemplo, sobre el que pondrás las perchas con las prendas a secar. Lo ideal es que estén cerca de una ventana.
7. Tendedero de techo
El tendedero de techo es uno de los más originales y novedosos, sobre todo cuando vives en un piso muy pequeño. Se colocan en el techo y se extienden o rebaten con una manivela. ¡Son excelentes!
Trucos infalibles
Además de los tendederos, prueba estos consejos:
- Elige los ambientes más secos de tu casa para colocar el tendedero. En lo posible, frente a una ventana o espacios que reciban una buena corriente de aire.
- Utiliza perchas siempre que puedas para colocar la ropa a secar. De esta forma, favoreces la circulación de aire por la prenda.
- Lava a diario, de a pequeñas cantidades, para evitar que se acumule mucha ropa.
- Usa un ventilador si las condiciones lo permiten.
Consejos para evitar el olor a humedad al tender la ropa dentro de casa
Es muy común que, al secar la ropa dentro de casa, las prendas adquieran un olor a humedad desagradable. A raíz de ello se puede generar moho. En este contexto, lo primero que tienes que hacer es abrir todas las ventanas que puedas para que corra aire.
Luego, al colgarla en el tendedero, deja espacio entre prenda y prenda para que el aire circule con facilidad. Si puedes, emplea un deshumidificador para absorber la humedad mientras se seca la ropa.
Esperamos que puedas aplicar algunos de estos consejos para que tu ropa quede seca y libre de olor a humedad. De todas maneras, siempre está la alternativa de acudir a un lavadero y luego retirar la ropa lista para guardar. Puede ser un poco oneroso, pero de vez en cuando, darse un gusto vale la pena.
Fuente: Mejor Con Salud
