Los clásicos decorativos se renuevan con el tiempo. Entre las técnicas milenarias encontramos el “tadelakt”. Veamos de qué se trata esta tendencia.
El tadelakt es la prueba fiel de que lo antiguo en algún momento se vuelve actual y acaba siendo tendencia. En este caso, nos ubicamos en el campo de la decoración y te estaremos presentando esta técnica que, a pesar de ser empleada desde hace muchísimos años, se impone cada vez más.
A continuación, repasaremos de qué se trata la práctica milenaria y sus orígenes. Sabrás cómo aplicarla y cuáles son sus pros y sus contras.
¿Qué es el “tadelakt”?
También conocido como “pintura efecto cemento” o “microcemento“, tiene una fuerte inspiración en el pasado marroquí. Se trata de un revestimiento o pátina que se aplica en las paredes y logra un aspecto similar al cemento, además de tener una textura muy particular.
El término es árabe y deriva del verbo dalaka, cuyo significado es “pulir o frotar”. Justamente en eso se basa esta técnica que es muy común en Marruecos y que, poco a poco, atravesó las fronteras.
En sus orígenes, se la empleaba para proteger las paredes de la humedad, ya que tiene un poderoso efecto impermeable. Asimismo, se usaba para la fabricación de piezas de cerámicas y marroquíes.
Ahora bien, el tadelakt se forma con cal y pigmentos naturales. Luego, se lo pule con guijarros para lograr el aspecto suave que tiene su acabado.
En la actualidad, a esa cal se le suman polvo de mármol y otros polvos minerales. Se utiliza una llana para emparejar la mezcla.
Tiene un acabado redondeado y suave a la vista. Es decorativo e impermeable a la vez, como así también es fungicida. Es por esto que se lo emplea, principalmente, en baños y cocinas.
Su antecesora más actual es la pintura a la tiza, cuyo acabado recuerda al terciopelo. Veamos, entonces, qué aplicaciones tiene el tadelakt.
¿Cómo y dónde se puede emplear el “tadelakt”?
Esta es una técnica muy versátil que se puede aplicar en diferentes ambientes de la casa, aunque los preferidos son el baño y la cocina. Se lo suele utilizar para recubrir suelos, paredes y hasta muebles, como mesadas y bachas. De igual modo, es apto para interior y exterior.
Recordemos que es un estucado más bien rústico, por lo que su acabado redondeado e imperfecto le queda estupendo. Originalmente, se frotaba con un canto rodado, por lo que este efecto curvo se lograba de manera más acentuada. En la actualidad, se emplea una llana, aunque el acabado redondeado persiste.
En cuanto a su aplicación, es justo decir que requiere de mano de obra especializada o al menos con algo de práctica. Todo dependerá del sitio que quieras revestir. Quizás, puedas empezar a hacerlo tú mismo en superficies más pequeñas, hasta que le tomes el punto a la técnica.
¿Cómo se aplica?
Este producto viene listo para utilizar y solo debes agregarle la cantidad de agua que indica el fabricante. Estas son algunas de las consideraciones que debes tener en cuenta antes de aplicar el tadelakt:
- Limpia la superficie en profundidad antes de la primera mano. Si notas orificios, asegúrate de cubrirlos.
- Se recomienda dar una base de imprimación antes de aplicar la primera capa, para que el producto se adhiera bien.
- Antes de colocar el tadelakt propiamente dicho, humedece la base.
- Al aplicar el producto, hazlo con una espátula o llana con movimientos en forma de semicírculos. De esta forma, ayudarás al efecto redondeado que se busca con este estucado.
- Con respecto al secado, lo ideal que seque una 8 o 10 horas.
- La segunda capa que apliques debe ser más gruesa que la primera y hay que dejar secar la misma cantidad de horas.
- Para terminar el trabajo, se le suele poner una capa final de cera o jabón negro de aceite de oliva. Esto se hace para garantizar que la superficie quede impermeable.
El tratamiento final se hace cada 2 años para renovar su efecto de repeler la humedad.
Si lo deseas, y para asegurarte de que revista bien las superficies, aplica más de 2 capas. No es dificultosa la técnica, solo que requiere de tiempo y paciencia.
Hay que esperar al menos unos 30 días antes de poder mojar la zona donde se aplicó este producto. Para limpiar los sectores con tadelakt no se emplean detergentes ni otras sustancias abrasivas, ya que lo estropearían.
En este sentido, solo necesitarás agua y jabón neutro para higienizar las superficies. No olvides que debes emplear una esponja suave para no dañarlo.
“Tadelakt”: ¿conviene o no?
Hasta aquí hemos repasado de qué se trata esta técnica decorativa que va cosechando adeptos. Sin embargo, es importante conocer cuáles son sus ventajas y sus desventajas.
El aspecto positivo que podemos señalar es su higiene. Al funcionar como un cemento tiene un efecto antibacteriano y es fungicida, debido al contenido de cal.
De igual modo, se trata de un revestimiento amigable con el medioambiente.
Otras de las ventajas es que repele la humedad. Por eso es tan usado en baños y cocinas. Te olvidarás del moho en techos y paredes. Además, se le pueden aplicar tintes, por lo que lograrás obtener otros colores, aparte del gris cemento.
Entre sus contras, podemos mencionar que requiere de la aplicación por parte de profesionales. Asimismo, necesita mucho tiempo de secado para que alcance la dureza que se busca. Es importante evitar el contacto con dichas zonas por un tiempo.
Finalmente, no es el material más económico. Quizás, es por esto que se lo suele aplicar en superficies reducidas.
Esperamos que puedas utilizar esta información a tu favor y que te animes a innovar.
Fuente: Mejor Con Salud
