América Latina es a menudo pasada por alto cuando se trata de amenazas persistentes y grupos cuyos blancos son seleccionados a partir de motivaciones políticas. Sin embargo, existe una operación de ciberespionaje en curso contra organizaciones de alto perfil que ha logrado mantenerse bajo el radar. El grupo detrás de estos ataques robó gigabytes de documentos confidenciales, principalmente de organismos gubernamentales. Al momento de esta publicación el grupo sigue estando muy activo, introduciendo regularmente cambios en su malware, en su infraestructura y en sus campañas de tipo “spear phishing”… Seguir leyendo