<\/span> La petrolera espa\u00f1ola Repsol prometi\u00f3 terminar en marzo la limpieza de la costa central de Per\u00fa, afectada por un derrame de casi 12.000 barriles de crudo en el mar, el 15 de enero.<\/span><\/span><\/span> <\/p> \n “Estimamos que si las condiciones meteorol\u00f3gicas nos acompa\u00f1an ser\u00e1 a mediados del mes de marzo” que finalice la recuperaci\u00f3n de las playas e islas alcanzadas por el crudo, dijo a la prensa el director de Seguridad Medioambiental de la empresa, el espa\u00f1ol Jos\u00e9 Terol.<\/span><\/span><\/span> <\/p> \n Terol, quien dirige las operaciones de limpieza, explic\u00f3 que en las zonas costeras de dif\u00edcil acceso, como acantilados y roquer\u00edos, la limpieza tomar\u00e1 m\u00e1s tiempo.<\/span><\/span><\/span> <\/p> \n “A mediados de febrero ya no habr\u00e1 manchas en el mar. En un escenario optimista los trabajos en la zona de dif\u00edcil acceso terminar\u00e1n a finales de marzo”, indic\u00f3.<\/span><\/span><\/span> <\/p> \n El derrame, calificado como “desastre ecol\u00f3gico” por el gobierno peruano, ocurri\u00f3 mientras el buque tanque “Mare Doricum”, de bandera italiana, descargaba en la refiner\u00eda de La Pampilla en Ventanilla, 30 km al norte de Lima, de Repsol. La compa\u00f1\u00eda atribuy\u00f3 el hecho a la agitaci\u00f3n del mar por la erupci\u00f3n volc\u00e1nica en Tonga.<\/span><\/span><\/span> <\/p> \n Repsol permiti\u00f3 por primera \u00a0vez una visita de periodistas a la refiner\u00eda, donde fue instalado el centro de operaciones de limpieza del derrame, en el que laboran 90 especialistas dirigiendo a casi 3.000 personas en el terreno.<\/span><\/span><\/span> <\/p> \n<\/div>\n
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