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El Madrid descuenta jornadas sin perder ventaja. Ese es el plan de un equipo obligado a ganar una Liga despu\u00e9s de haberla ganado en diciembre. No salieron de inicio Kroos y Modric, soldados para otra batalla, ni apareci\u00f3 Benzema por los cuatro costados, pero s\u00ed lo hizo Vinicius,<\/strong> que cada d\u00eda aprende a tocar un instrumento. Esta vez fue un pase de exterior, un toque de templaza salido de la derecha de un agitador, quien ech\u00f3 abajo las murallas del Getafe. Casemiro puso su cabeza para que aquello sonara a bossanova<\/em>.<\/strong> El equipo de Quique solo quiso ser resistente, poca cosa para sobrevivir en el Bernab\u00e9u. . <\/p> \n A la hora que Ancelotti anunciaba su once ante el Getafe, el Chelsea acababa de hacerle un set en blanco al Southampton, un clase media del f\u00fatbol ingl\u00e9s. Qui\u00e9n sabe si hubo un principio de causa-efecto, pero lo cierto es que el aviso que lleg\u00f3 de la Premier coincidi\u00f3 con la precauci\u00f3n del italiano de guardarse a Kroos y Modric,<\/strong> decisi\u00f3n de las que dan v\u00e9rtigo aunque al adversario ande cerca de la cola y todo tenga remedio en LaLiga. Pero el Madrid anda con un ojo en el Oscar y otro en los Goya y camina sobre la delgada l\u00ednea que separa la necesidad y la virtud. A buen seguro que a Ancelotti tambi\u00e9n le hubiese apetecido ahorrarse a Courtois y Benzema,<\/strong> pero poner un caudillo en cada \u00e1rea le ha tra\u00eddo en carroza hasta aqu\u00ed. <\/p> \n Con Valverde y Camavinga, el Madrid fue otra cosa: una presi\u00f3n m\u00e1s alta, una construcci\u00f3n m\u00e1s baja. Lo que ah\u00ed perdi\u00f3 quiso ganarlo en las bandas, con dos extremos metidos en la piel de laterales. Aun as\u00ed, le cost\u00f3 al principio frente a un Getafe muy bueno en lo suyo, mortificar al adversario, negarle el espacio, emplearse en cada ayuda. Incordios as\u00ed tambi\u00e9n son de curso legal en el f\u00fatbol.<\/strong> Otra cosa es que ese plan tambi\u00e9n exige soltar una contra de cuando en cuando para quitarle el ansia ofensiva al oponente. En esta segunda parte suspendi\u00f3. <\/p> \n Dicho esto, y pese a la presencia de Enes \u00dcnal y Mayoral, quiz\u00e1 el pr\u00f3ximo nueve blanco de repuesto, el partido circul\u00f3 en una sola direcci\u00f3n.<\/strong> Sin meter el DRS que acostumbra en la Champions, el Madrid fue trabaj\u00e1ndose el duelo. En las bandas, con Marcelo y Vinicius en la izquierda, que fabricaron las primeras ocasiones; en el centro, con un buen disparo de Valverde, un futbolista m\u00e1s de avenidas que de callejones; a la carrera, con una buena llegada de Lucas V\u00e1zquez. Sin embargo, no daba con la verdadera salida del laberinto, encontrar a Benzema en aquel bosque azul,<\/strong> porque nadie como el franc\u00e9s para manejarse en las distancias cortas. <\/p> \n Le fue mejor a Vinicius, que cimbre\u00e1ndose sobre la banda izquierda estuvo a punto de hacer rentables un par de zigzagueos. Al final siempre aparec\u00eda un defensa del Getafe. Aquello era ir de guardaespaldas en guardaespaldas. Y entonces decidi\u00f3 intentarlo a contraestilo. Tom\u00f3 el bal\u00f3n en la banda, abri\u00f3 su horizonte hacia el centro y meti\u00f3 un centro perfecto con el exterior del pie (de algo tiene que servir la convivencia con Modric), de esos que agarran un efecto indefendible, al que no lleg\u00f3 el titular de la plaza, Benzema, pero s\u00ed un rematador de segunda instancia, Casemiro. En plancha super\u00f3 a David Soria. <\/p> \n De ah\u00ed al descanso meti\u00f3 el Madrid un aceler\u00f3n. La cosa estaba en archivar pronto este caso, inevitable entre Chelsea y Chelsea. Benzema y Marcelo, que frente a rivales de poca profundidad todav\u00eda es muy \u00fatil, lo probaron sin suerte. Tambi\u00e9n qued\u00f3 tiempo para que Casemiro hiciera una protesta absurda que le cost\u00f3 la tarjeta y perderse el partido del pr\u00f3ximo domingo en Sevilla. La continencia nunca fue su fuerte. <\/p> \n Aquella onda expansiva no tuvo continuidad en la segunda parte. Quique meti\u00f3 a \u00d3scar y Sandro para darle color a su equipo sin resultado y el Madrid puso el piloto autom\u00e1tico demasiado pronto. Nadie est\u00e1 libre de un gol accidental que lo estropea todo. No solt\u00f3 el control del partido pero pis\u00f3 menos \u00e1rea. Marcelo mand\u00f3 un trallazo al lateral de la red y Valverde uno m\u00e1s lejano en intencionado que roz\u00f3 el palo. <\/p> \n El Getafe tambi\u00e9n fue agriet\u00e1ndose atr\u00e1s, por cansancio o por aburrimiento. De otra forma no se explica el segundo tanto encajado por un equipo tan bien protegido. Un tuya m\u00eda de Lucas V\u00e1zquez y Rodrygo acab\u00f3 con el gallego en el \u00e1rea peque\u00f1a. Tuvo tiempo y espacio, hecho ins\u00f3lito en la zona. Coloc\u00f3 la pelota en la red con su zurda. <\/p> \n El gol cerraba el partido y le abr\u00eda hueco a Gareth Bale, ese crack que perdi\u00f3 la salud, la actitud y el juego. Por ese orden. Dos a\u00f1os llevaba sin pisar el Bernab\u00e9u. Hubo ovaci\u00f3n para Benzema en la salida y pitos sin paliativos para el gal\u00e9s. Ni siquiera en tiempos de paz olvida este p\u00fablico la falta de compromiso. No habr\u00e1 puente de plata para \u00e9l en su marcha. <\/p> \n Tambi\u00e9n tuvo minutos Ceballos tras la disculpa de Ancelotti por obviarle m\u00e1s de lo debido. No tiene porvenir aqu\u00ed, pero ayud\u00f3 esta vez a que el descanso de Kroos y Modric fuera completo. El Chelsea volver\u00e1 exigirles que anden de punta en blanco. <\/p> \n \u00a0 <\/p> \n<\/div>\n Vinicius prepara, Casemiro dispara<\/strong><\/h3>\n
Volvi\u00f3 Bale<\/strong><\/h3>\n