<\/span> En medio de todos los trabajos informales que se pueden encontrar en Colombia, un pa\u00eds de personas resilientes y que luchan a diario por salir adelante, existen oficios de los que muchos se benefician, a veces ilegalmente, pero que hacen\u00a0la vida m\u00e1s f\u00e1cil a los dem\u00e1s.<\/span><\/span><\/strong> <\/p> \n Este es el caso de los bicitaxistas, un servicio que usan numerosas personas en diferentes regiones de Colombia y que ayudan a suplir las necesidades de transporte en muchos barrios de la capital del pa\u00eds.<\/span><\/span> <\/p> \n EL NUEVO SIGLO habl\u00f3 con uno de ellos. Un bicitaxista que lleva siete a\u00f1os en el oficio y que hace parte de los muchos que recorren las calles de la inmensa y desafiante Bogot\u00e1.<\/span><\/span> <\/p> \n \u201cEste trabajo es muy duro y al no estar legalizados es a\u00fan m\u00e1s dif\u00edcil\u201d, sostiene Dar\u00edo S\u00e1nchez, de 60 a\u00f1os, un bicitaxista que vive con su esposa, quien tiene discapacidad auditiva y del habla, en la localidad de Rafael Uribe Uribe, en el sur de la ciudad. El se\u00f1or S\u00e1nchez, como muchos colombianos, trabaja cada d\u00eda incansablemente por sostener su hogar.<\/span><\/span><\/strong> <\/p> \n Su voz se quiebra cuando empieza a contar la historia de esta vida de peque\u00f1o transportador, pues dice que las condiciones de su trabajo son muy dif\u00edciles; al no estar legalizado, por su edad, por la condici\u00f3n de su esposa, entre otros desaf\u00edos que debe enfrentar, y por los que el d\u00eda a d\u00eda se hace m\u00e1s desgastante. \u201cMe cuesta conseguir mensualmente para pagar el arriendo, adem\u00e1s de suplir todas mis necesidades\u201d, asegura.<\/span><\/span> <\/p> \n Don Dar\u00edo trabaja de 5 de la ma\u00f1ana a 10 de la noche y en ese horario extendido puede ganar entre $30.000 y $50.000 diarios.<\/strong> Por fortuna para \u00e9l, es el due\u00f1o del veh\u00edculo, porque de no ser as\u00ed tendr\u00eda que cancelar una cuota de $22.000, que es la suma que deben pagar los arrendatarios de los veh\u00edculos para poder trabajar.<\/span><\/span> <\/p> \n Como muchos en su oficio, este bicitaxista vive del dinero que consigue a diario, as\u00ed que no es f\u00e1cil hacer planes porque no sabe qu\u00e9 le depara cada d\u00eda ni cu\u00e1nto podr\u00e1 ganar, c\u00f3mo va a estar el clima, que puede beneficiar o entorpecer su labor, y si tendr\u00e1 los mismos usuarios que el d\u00eda anterior.<\/span><\/span> <\/p> \n \u201cMis hijos no me ayudan con los gastos, por ahora no tengo seguridad social y tampoco pago pensi\u00f3n, aunque las hijas de mi esposa a veces nos dan algo de plata\u201d, asegura. \u00a0<\/span><\/span><\/strong> <\/p> \n \u201cNo estamos legalizados\u201d<\/strong><\/span> <\/p> \n Sostiene que “en este momento no estamos legalizados. Yo quiero que el gobierno nos colabore, porque uno sufre mucho para ganarse la plata en este trabajo y ser\u00eda muy bueno que nos podamos legalizar\u201d, asegura S\u00e1nchez.<\/span><\/span><\/strong> <\/p> \n De ser as\u00ed, se evitar\u00edan multas\u00a0adem\u00e1s de permanecer todo el tiempo con miedo de que llegue la polic\u00eda y se lleve sus veh\u00edculos, que son su herramienta de trabajo.<\/span><\/span> <\/p> \n \u201cEn alguna ocasi\u00f3n se llevaron mi bicitaxi a los patios y me toc\u00f3 pagar $500.000 para poderlo sacar, adem\u00e1s de pagar el comparendo\u201d, asever\u00f3.<\/span><\/span> <\/p> \n Adicionalmente S\u00e1nchez sostiene que \u201cser\u00eda de gran ayuda que el gobierno nos colabore poniendo el motor el\u00e9ctrico a nuestros carros. El que yo tengo tiene motor a gasolina y el tanque se llena aproximadamente con $8.000 <\/strong>y con eso se puede trabajar todo el d\u00eda, aunque a diario hay que poner $3.000, aproximadamente. El cambio ser\u00eda mejor porque el olor a gasolina molesta a los usuarios\u201d.<\/span><\/span> <\/p> \n Sin duda con el \u00faltimo aumento del precio de los combustibles, el se\u00f1or S\u00e1nchez, as\u00ed como el resto de sus compa\u00f1eros, se ver\u00e1n afectados.<\/span><\/span> <\/p> \n Por otra parte, afirm\u00f3 que \u201calgunas veces los vecinos de las tiendas o supermercados que est\u00e1n en frente de donde nos parqueamos llaman a la polic\u00eda y eso dificulta nuestra labor. No queremos seguir viviendo con miedo, queremos trabajar tranquilos\u201d, resalt\u00f3.<\/span><\/span> <\/p> \n La ruta <\/strong><\/span> <\/p> \n Respecto a su jornada se\u00f1ala que \u201cyo trabajo en el barrio Restrepo, el Bosque de San Carlos, Centenario, Gustavo Restrepo y San Jos\u00e9. Mi recorrido m\u00e1s largo es ir hasta Ciudad Jard\u00edn Sur y el m\u00e1s corto es el del Bosque de San Carlos\u201d.<\/span><\/span><\/strong> <\/p> \n En las rutas cortas el pasaje tiene un costo de $3.000 y en las m\u00e1s largas entre $4.000 y $5.000. En cada recorrido se pueden transportar dos usuarios y \u201ccuando hay los ni\u00f1os no les cobro el pasaje\u201d, asegura este bicitaxista.<\/span><\/span> <\/p> \n Antes de trabajar con este medio de transporte, Dar\u00edo S\u00e1nchez era embolador. \u201cTrabajaba en un paradero de busetas lav\u00e1ndolas y barri\u00e9ndolas y embetunando zapatos. Pero luego ese trabajo se acab\u00f3\u201d.<\/span><\/span><\/strong> <\/p> \n Entonces fue cuando en el 2015 empez\u00f3 en este oficio en el que todos los d\u00edas lleva a personas a sus casas o alg\u00fan lugar en su ruta en el sur de Bogot\u00e1.<\/span><\/span> <\/p> \n S\u00e1nchez inaugur\u00f3 el recorrido en el Barrio Gustavo Restrepo con otro compa\u00f1ero y con el tiempo se fueron sumando m\u00e1s bicitaxistas. Actualmente son nueve.<\/span><\/span> <\/p> \n La compra <\/strong><\/span> <\/p> \n \u201cYo le compr\u00e9 mi veh\u00edculo a un abogado. Lo compr\u00e9 a pedal en $1.000.000, en ese entonces trabajaba de domingo a domingo y le pagaba $20.000 diarios, aunque mi esposa hab\u00eda hecho un adelanto de $500.000″, indica.<\/span><\/span><\/strong> <\/p> \n Agrega a su relato que “cuando comenc\u00e9, \u00e9l me alquilaba el veh\u00edculo y en algunas ocasiones le ped\u00eda plata para los arreglos, pero siempre me dec\u00eda que no ten\u00eda dinero para las reparaciones. Finalmente, un d\u00eda le dije que no pod\u00eda seguir trabajando con el bicitaxi en esas condiciones y luego de eso me dijo que me lo vend\u00eda y yo acept\u00e9\u201d.\u00a0Agreg\u00f3 que \u201ccuando uno quiere comprar o conseguir algo, hace el esfuerzo por lograrlo\u201d.<\/span><\/span> <\/p> \n Entre muchas otras cosas, expres\u00f3 su preocupaci\u00f3n ya que hace algunos d\u00edas el arrendador de la casa en donde vive le dijo que ya no pod\u00eda seguir all\u00ed, as\u00ed que deber\u00e1 empezar a buscar pronto otro lugar al cual trastearse.<\/span><\/span><\/strong> <\/p> \n Con incertidumbre y tristeza cuenta que es dif\u00edcil esa y todas las situaciones por las que atraviesa a diario; por su edad, por las condiciones laborales y por la discapacidad de su esposa. \u201cCon mi esposa nos conocimos hace ocho a\u00f1os cuando yo trabajaba como embolador, desde entonces estamos juntos\u201d, dice feliz, en medio de su angustia.<\/span><\/span> <\/p> \n A\u00f1ade que esta es una familia de dos que como muchas en el pa\u00eds enfrenta adversidades todos los d\u00edas, pero sin derecho a rendirse. Las l\u00e1grimas de Dar\u00edo cuando habla de su historia sin duda son genuinas, con tristeza, pero tambi\u00e9n con la ilusi\u00f3n de que las cosas puedan cambiar y estar mejor.<\/span><\/span><\/strong> <\/p> \n<\/div>\n
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