Tras las tristezas que invadieron a sus aficionados esta semana por la amarga celebración de los 81 y la eliminación de la Copa Libertadores, Santa Fe y Millonarios se aprestan a darles un alivio hoy en desarrollo del clásico número 303.
Siempre se ha dicho que para los hinchas vale más una victoria en un derbi que un título. Por ello, un triunfo hoy en El Campín sería un bálsamo para la escuadra que lo logre, mientras que el empate dejará un sabor agridulce.
Los técnicos, Martín ‘Chapulín’ Cardetti y Alberto Gamero, así como sus jugadores, saben que la mejor forma de aliviar las penas es con una victoria y, por lo mismo, que tienen que salir a proponer, a buscarla, no a especular.
La diferencia en puntos, 13 de los ‘Cardenales’, frente a 20 de los azules, o en el número de triunfos a lo largo de la historia de los clásicos capitalinos, no pasan de ser una fría estadística frente a lo que pueda ocurrir después de las 6:10 p.m. en el gramado del coloso de la calle 57.
Millonarios suma 117 victorias sobre 82 de su compañero de patio, ha marcado 447 goles frente a 370 en la historia, mientras que en el actual torneo las diferencias son de 6 partidos ganados por los azules contra tres de los albirrojos.
Estas frías estadísticas tampoco jugarán y únicamente sirven de referencia para señalar que el local, en este caso Santa Fe, además de darle una satisfacción a sus parciales, buscará descontar la diferencia en cuanto al número de clásicos ganados frente a los azules. De presentarse paridad, será la 105.
Las cinco últimas confrontaciones entre ‘Cardenales’ y azules dejan un saldo de dos empates, dos triunfos del 15 veces campeón del rentado colombiano, por una de los ‘leones’.
Necesitados
Los santafereños esperaban celebrar sus 81 años con una victoria esta semana ante Patriotas pero el equipo boyacense les aguó la fiesta sobre los minutos finales.
Pero no es ese el único estímulo que tienen los ‘Cardenales’ para salir a buscar los tres puntos hoy, sino que necesitan consolidarse entre los ocho que irán a la siguiente ronda.
Antes del inicio de la décima jornada, los dirigidos por el ‘Chapulín’ Cardetti marchaban octavos con 13 puntos, pero con Alianza Petrolera, América, La Equidad y Cortuluá asechándolos a un punto, así como Bucaramanga y Águilas Doradas a dos unidades.
Una derrota los dejará fuera de los ocho y prolongaría la resaca de los jugadores, que además tienen el compromiso de equilibrar su rendimiento, puesto que de un partido a otro dejan distintas sensaciones.
Para este encuentro, los ‘Cardenales’ todavía no podrán contar con su arquero titular, Leandro Castellanos, quien tan solo mañana volverá a trabajos luego de ser operado de apendicitis.
En cambio recupera a dos de sus figuras, Wilfrido de la Rosa y Matías Mier, quienes el jueves recibieron el alta médica.
Una baja sensible será en la defensa, luego que José Ortiz viera la tarjeta roja en el partido ante Patriotas, en el que empataron 1-1 en Tunja.
Con estos dos jugadores, el técnico Cardetti espera que el equipo recupere la generación y continuidad de juego que lo ha hecho ver bien en algunos partidos y poder enfrentar mano a mano a Millonarios.
Una de las críticas que le hacen a Santa Fe es que cambia mucho de un partido a otro en su estilo de juego y la otra tiene que ver con las decisiones erradas del técnico a la hora de hacer los cambios. Hoy tienen la oportunidad de mostrar su verdadera cara.
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Para afianzarse
Mientras Santa Fe necesita con urgencia los tres puntos para consolidarse en el grupo de los ocho, Millonarios los requiere para defender su liderato.
Antes de comenzar a jugarse la jornada de clásicos los celestes superaban por un punto al Deportes Tolima y por tres al otro herido que dejó la Copa Libertadores, Atlético Nacional.
Los tres puntos lo mantendrían al comando de la Liga BetPlay y sanarían una herida que fue menos profunda que la de Nacional, por cuanto fue eliminado por un rival que desde un comienzo era favorito para ganar la serie, como el Fluminense, en tanto que los antioqueños sucumbieron ante un Olimpia que era manejable.
Para este clásico, Millonarios podrá contar con el venezolano Eduardo Sosa como volante creativo y a la espera de que no se haga expulsar.
Luego de utilizar la nómina emergente, que le dio dos victorias, el técnico Gamero volverá a emplear el equipo base, con Álvaro Montero en el arco, Felipe Román, Andrés Llinás, Juan Pablo Vargas y Omar Bertel en la zaga; Stiven Vega, Larry Vázquez, David Silva, Daniel Ruiz y Sossa en el sector medular y en punta Diego Erazo, aunque por su falta de gol bien podría ocupar su lugar Jader Valencia.
Millonarios, a diferencia de su rival de patio, tiene una idea clara de juego, en la que la tenencia de balón y la presión para recuperarlo son fundamentales.
Además, desde la llegada de Arnoldo Iguarán a trabajar en la definición, los azules han mejorado y ya suman nueve tantos en igual número de partidos disputados, es decir, uno por cotejo, y su valla es una de las menos vulneradas con tan solo tres tantos recibidos.
Santa Fe tiene una mejor ofensiva, lleva 12 goles convertidos pero su defensa es una de las más batidas con 11 tantos en contra.
Sea lo que sea, el partido pinta para ser clásico y los aficionados terminarán siendo los grandes ganadores. Millonarios siempre juega bien y Santa Fe ha tenido partidos muy buenos.
Otros juegos
Hoy además se disputan otros dos clásicos regionales. A partir de las 4:05 p.m., Alianza Petrolera recibe a Bucaramanga y Atlético Nacional a Medellín.
Los petroleros, con 12 puntos son novenos y buscan meterse al grupo de los ocho, mientras que ‘Leopardos’ son 13 con 11 unidades y buscan recuperar el terreno perdido, ahora bajo las órdenes del técnico Armando ‘Piripi’ Osma.
Entre tanto, Nacional y Medellín llegan parejos. Los verdes son terceros con 17 unidades y los rojos cuartos con 15.
Para los dirigidos, por ahora, por Hernán Darío ‘Arriero’ Herrera, es la oportunidad de sanar en algo la profunda herida que les dejó la eliminación de la Copa Libertadores.
El ‘Poderoso’ tiene la ventaja de que juega en el Atanasio Girardot. Allí ha cimentado su campaña de este año porque a domicilio sus resultados son pobres.
Fuente: El Nuevo Siglo
