El presidente Joe Biden rechazó el pedido de privilegio ejecutivo del expresidente Donald Trump y ordenó que se entreguen los registros de visitantes de la Casa Blanca al panel que investiga el mortal ataque del 6 de enero de 2021, según una carta publicada el miércoles.
En una carta dirigida a los Archivos Nacionales, el asesor de Biden en la Casa Blanca concedió a los investigadores del Congreso el acceso a los datos dada la urgencia de su trabajo para investigar el violento asalto de los partidarios de Trump al Capitolio de Estados Unidos el año pasado, y ordenó a la agencia que entregue los registros en un plazo de 15 días.
“El presidente ha determinado que una afirmación de privilegio ejecutivo no resulta en un mejor interés para Estados Unidos, y por lo tanto no está justificado, en cuanto a estos registros y partes de los registros”, escribió la abogada de Biden, Dana Remus, en la carta fechada el 15 de febrero.
Los representantes de Trump, un republicano, no pudieron ser contactados inmediatamente para hacer comentarios.
Biden, un demócrata, también rechazó el año pasado el intento de Trump de bloquear la comisión de la Cámara de Representantes que investiga el asalto del 6 de enero para acceder a documentos de la época del expresidente en la Casa Blanca.
Tribunales federales también se han opuesto a la demanda de Trump que buscaba retener los registros.
Remus, en la carta, dijo que los registros de quienes visitaron la Casa Blanca antes de que Trump se fuera el 20 de enero de 2021 deben ser entregados rápidamente “a la luz de la urgencia” del trabajo del comité y la “necesidad imperiosa” del Congreso.
“Las protecciones constitucionales del privilegio ejecutivo no deben ser usadas para esconder, del Congreso o del público, información que refleja un claro y aparente esfuerzo por subvertir la propia Constitución”, escribió Remus.
La Casa Blanca planeaba informar a los abogados de Trump sobre la decisión el miércoles, según el New York Times, que informó primero de la carta.
Los representantes de la Administración Nacional de Archivos y Registros de Estados Unidos (NARA) no pudieron ser contactados inmediatamente para hacer comentarios. La Casa Blanca tampoco pudo ser contactada inmediatamente.
Fuente: La Republica