El crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de Francia alcanzó el 7% en 2021 tras la recesión récord de 2020 (-8%), según una primera estimación, mientras que la economía española creció un 5,0% el año pasado, anunció este viernes el Instituto Nacional de Estadística (INE), en análisis provisional que es un 1,5% inferior al objetivo del Gobierno.
Francia
La evolución de la economía francesa, que se espera sea una de las más fuertes de la zona euro, supera las previsiones del Instituto Nacional de Estadística (Insee) y del Banco de Francia, que auguraban un crecimiento del 6,7% para el año pasado.
La última vez que la economía francesa creció tanto fue en 1969, justo después de la crisis provocada por el movimiento de mayo de 1968.
Con un cuarto trimestre de 2021 que experimentó un crecimiento del 0,7%, la actividad “supera claramente” al final del año su nivel anterior a la crisis sanitaria, subraya el Insee.
El año pasado, el Estado gastó un poco más de 60 mil millones de euros, al precio de un déficit público que debería rondar el 7% del PIB y una deuda pública en torno al 113%.
Con un crecimiento así, Francia podría registrar uno de los mejores resultados de la zona euro.
El crecimiento del PIB en Alemania se estancó en 2,8% el año pasado (-4,9% en 2020) y en España fue del 5% (-10,8% en 2020).
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En el conjunto de 2021, el PIB se mantiene “un 1,6% por debajo de su nivel medio en 2019”, según el instituto, porque la primera parte del año todavía estuvo marcada por importantes restricciones sanitarias relacionadas con la epidemia de covid-19.
Para 2022, el gobierno apuesta por un crecimiento del 4%, pero el Banco de Francia prevé que sea de un 3,6%.
La previsión llegó antes de la ola de la variante ómicron del covid, pero el ministro de Economía, Bruno Le Maire, se mostró optimista y dijo el miércoles que no teme “a los efectos de ómicron” en el crecimiento.
El otro riesgo importante para la economía, la inflación, se situaba en un 2,8% en diciembre, impulsada por la energía. Un factor que podría lastrar el poder adquisitivo de los hogares y frenar su consumo.
España
“En términos de volumen, el PIB registra una variación del 5,0%“, anunció el INE, tras constatar un crecimiento “del 2,0% en el cuarto trimestre de 2021 respecto al trimestre anterior en términos de volumen”, dice el comunicado oficial.
El gobierno español preveía para 2021 un alza del Producto Interior Bruto (PIB) de 6,5%, tras el retroceso de 10,8% en 2020 por la crisis de la pandemia de coronavirus.
En contrapartida, el dato de 2021 es superior a las expectativas del FMI (Fondo Monetario Internacional) y la OCDE (Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos), que barajaban un crecimiento en España de 4,6% y 4,5%, respectivamente.
El crecimiento del 5% se alcanzó a pesar de los bajos datos de consumo: según el INE, este cayó un 1,2% en los tres últimos meses del año, tras haber sido ya menor de lo esperado en el trimestre anterior (+1%).
El gasto de los hogares españoles se vio afectado en los últimos meses por el aumento de la inflación, que en diciembre alcanzó el nivel más alto en 30 años, el 6,5%, debido a la subida de los precios de la energía.
Según el centro de estudios Funcas, se espera que la inflación pierda ritmo ligeramente en 2022, pero que se mantenga en un nivel elevado (3,5%). El crecimiento debería acelerarse hasta el 5,6%, lo que permitiría borrar definitivamente las pérdidas sufridas en 2020 por la economía española.
El gobierno español, que prevé un crecimiento del 7% para 2022, muy por encima de las expectativas de los principales organismos económicos, había asegurado que la economía española volvería a sus niveles anteriores a la pandemia a finales de 2021.
Pero debido a los retrasos de los últimos meses, no se espera alcanzar este objetivo hasta principios de 2023, según la Comisión Europea.
El gobierno del socialista Pedro Sánchez mostró en un comunicado “su satisfacción” por el dato, mientras la oposición destacó que era inferior a las previsiones.
“Los fondos europeos son una oportunidad histórica para reindustrializar, modernizar y hacer crecer a nuestro país”, destacó el gobierno, en alusión al plan europeo de relanzamiento después de la crisis de la pandemia.
España tiene muchas esperanzas depositadas en el fondo de recuperación europeo, del que prevé recibir 140 mil millones de euros (156 mil millones de dólares) hasta 2026, de los cuales 70 mil millones son a fondo perdido, una ganancia crucial para la economía del país, muy afectada por la crisis sanitaria.
Fuente: El Nuevo Siglo
