Durante una marcha pacífica realizada este miércoles en Miranda (Cauca), trabajadores del sector de la caña y la Asociación de Víctimas del norte del Cauca, que agrupa a la población civil, campesinos y productores agrícolas, rechazaron las constantes afectaciones de la que han sido víctima desde el 2014 por parte de grupos criminales, que no solo amenaza sus vidas sino la estabilidad social y económica de esta parte del país.
De acuerdo con las víctimas, los actores armados, por medio de acciones violentas, invaden terrenos, destruyen cultivos y llevan zozobra a miles de familias.
“Hoy son más de 3.500 empleos destruidos en nuestra región y está en riesgo la subsistencia de más de 20 mil familias de ocho municipios del norte del Cauca, que devengan su sustento de labores agrícolas y de negocios de economía familiar que ofrecen servicios a la población trabajadora”, denuncia la Asociación.
Según los habitantes de la región, más de 3.000 hectáreas han sido invadidas por personas que actúan de forma ilegal, lo que afecta el derecho al trabajo, la propiedad privada y la seguridad.
Ante este panorama hacen un llamado a las instituciones del país para que protejan los territorios, se garanticen los derechos y se defienda el empleo como motor de desarrollo de la región.
La alcaldía de Miranda logró un acercamiento con los líderes de la marcha para establecer acuerdos sobre las peticiones de los manifestantes.
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Fuente: Portafolio
