Inversión extranjera directa creció 75% en 2021 en América Latina

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La inversión extranjera directa (IED) registró en 2021 un impulso global de recuperación frente a la caída el año anterior por efectos de la pandemia. América Latina y el Caribe no estuvo lejos de esta coyuntura.

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En concreto, de acuerdo con un informe de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD, por sus siglas en inglés), en América Latina y el Caribe, la IED se sumó un estimado de US$175 mil millones, lo cual representó un incremento de 75% entre 2020 y 2021 y, según el texto, “está muy cerca de los niveles prepandemia”, ya que para 2019 a la región entraron US$156 mil millones en IED.

Sumando a Norteamérica (IED de US$383 mi millones en 2021), la región de las Américas se sitúa como la segunda que más recibió inversión extranjera directa el año anterior (US$531 mil millones), por detrás de Asia (US$696 mil millones) y por delante de Europa (US$305 mil millones).

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Es preciso destacar que en líneas generales, los flujos mundiales de IED mostraron un fuerte repunte en 2021 de 77%, a un aproximado de US$1,65 billones frente a los US$929 mil millones en 2020 y superando los niveles de 2018 cuando se alcanzó los US$1,48 billones.

Las economías desarrolladas experimentaron el mayor aumento de la IED en el 2021, donde se alcanzó un pronóstico de US$777 mil millones, un crecimiento de 199% frente a 2020.

En contraparte, en las economías en desarrollo, el crecimiento frente al año de pandemia, apenas fue de 30%.

La recuperación de los flujos de inversión hacia los países en desarrollo es alentadora, pero el estancamiento de las nuevas inversiones en los países menos adelantados en industrias importantes para las capacidades productivas, y en los principales sectores para los objetivos de desarrollo sostenible (ODS), como la electricidad, los alimentos o la salud, es un motivo importante de preocupación”, dijo la secretaria general de la UNCTAD, Rebeca Grynspan.

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PAÍSES EN DESARROLLO

A pesar de la buena recuperación en los países en desarrollo la inversión en los sectores claves para los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS) sigue “siendo frágil”, detalló el informe.

El valor combinado de los anuncios de inversiones en nuevas instalaciones y los acuerdos de financiación de proyectos aumentó en un 55%, pero principalmente debido a un pequeño número de acuerdos muy grandes en el sector de las energías renovables”, explica el documento.

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En 11% creció el número de proyectos de inversión revelantes para los ODS en las economías en desarrollo, impulsadas por iniciativas de energías renovables y de servicios públicos.

LO QUE VIENE PARA EL 2022

Si bien existe optimismo frente a lo que pueda suceder en el sector para el 2022, la inversión extranjera directa tiene “pocas posibilidades” de repetir las alzas de crecimiento del año pasado.

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“La tendencia subyacente, transacciones puntuales y flujos financieros intraempresariales seguirá siendo moderada, como en 2021”, relató el informe. Los proyectos de infraestructura con financiación internacional impulsará el crecimiento.

PORTAFOLIO

Fuente: Portafolio