El sector aeroespacial está en constante desarrollo y es uno de los más importantes en cuanto a aportes a la humanidad, pues sus hallazgos son, en muchas ocasiones, la base para mejorar la vida de las personas.
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Durante el evento tecnológico Universo Totvs 2022, realizado en São Paulo (Brasil), por la empresa tecnológica Totvs, una de las más grandes de América Latina, Portafolio habló con Ivair Gontijo, ingeniero de sistemas de la Nasa, quien dio un panorama sobre el presente de la industria aeroespacial, cómo están Colombia y la región en el tema y cuáles son los países que están sobresaliendo en el sector actualmente.
¿Cómo está actualmente el mercado de la tecnología aeroespacial?
El mercado de la tecnología aeroespacial está muy bien actualmente. Existen muchas empresas que trabajan en esa área y desarrollan tecnología, principalmente, para lo que son lanzamientos.
También se están desarrollando instrumentos como cámaras espaciales.
Y hay varios países que están realizando colaboraciones con la Nasa y la Agencia Espacial Europea (ESA), lo que ha ayudado a que el mercado esté muy fuerte.
España, Francia y Estados Unidos, por ejemplo, crearon una súper cámara espacial para la misión Marte 2020, en un laboratorio de Nuevo México (Estados Unidos). Y yo hice parte de ese proyecto.
¿Qué papel está jugando América Latina actualmente y qué es lo más reciente que se ha hecho en la región?
Brasil ha hecho colaboraciones, pero en menor medida, junto con Argentina.
La colaboración de estos países consistió en que, desde Estados Unidos, la Nasa envío la tecnología, Argentina desarrolló el satélite y Brasil hizo el lanzamiento.
Brasil, además, ha colaborado con rastreos y seguimientos de satélites: por ejemplo, cuando lanzaron el telescopio James Webb, lo que hizo el país fue acompañar la trayectoria del mismo y reportar información a la Nasa.
Ivair Gontijo, científico de la Nasa
Cortesía
¿Y Colombia cómo está?
Hay varios colegas colombianos que están trabajando en la Nasa y que están aportando mucho en desarrollos científicos.
Hablando de su trabajo, ¿cuál fue su aporte en la misión a Marte 2020?
Estuve en ese proyecto y consistió en enviar el vehículo Perseverance con una súper cámara.
Lo que buscábamos con la misión es descubrir elementos químicos y minerales en Marte: materiales orgánicos genuinamente marcianos.
¿Y qué han encontrado?
Se han recogido muestras para traerlas a la Tierra y analizarlas, para estudiar si se formó vida en Marte.
Y ahí está nuestra próxima gran meta: conseguir la mayor cantidad de muestras para conocer más de la vida marciana. Aquí en la Tierra tenemos tecnología altamente avanzada y esas muestras deberían llegar en el 2031.
¿Cómo se usa la tecnología aeroespacial para ayudar al medio ambiente?
Se usa mucho para hacer mediciones, como con la Amazonía y monitorear la deforestación. Para eso Brasil lanzó, recientemente, un satélite.
La mayoría de las misiones de la Nasa son para estudiar el planeta Tierra y la mayoría de los satélites están estudiando, constantemente, los cambios y efectos climáticos.
¿Qué países se están destacando o están sobresaliendo en la industria aeroespacial?
Como ya sabemos, Estados Unidos, Rusia, China son países que están a la vanguardia de esta industria.
Además de ellos, hay otros varios que están destacándose por sus desarrollos y aportes a la industria.
Está Nueva Zelanda, donde un empresario creó la empresa Rocket Labs, que se dedica a lanzamientos de satélites pequeños.
España también es un caso muy interesante. Allá hay un centro de astrobiología, exactamente en Madrid, donde se creó una estación meteorológica para Curiosity, el vehículo que se lanzó a Marte en el 2012. Por eso, cuando Perseverance se construyó, los españoles propusieron una nueva herramienta que ayudara en la medición de temperatura, presión, dirección y velocidad del viento y medidas de la luz ultravioleta en Marte.
Ese instrumento se llama Meda (Mars Environmental Dynamics Analyzer).
Otro país que está sobresaliendo es Noruega, donde se construyó un vehículo que penetra el suelo marciano, a más de 10 metros de profundidad, para estudiar y analizar las rocas.
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¿Cómo ve el futuro del mercado aeroespacial?
Por ahora, los instrumentos que se han desarrollado son de carácter científico y sirven para producir resultados importantes que ayudan al desarrollo de la humanidad. No sé si en un futuro se vayan a convertir en productos que se comercialicen.
CAMILO HERNÁNDEZ M.
Fuente: Portafolio
