Durante años se ha especulado con que el consumo de cítricos podría incrementar la incidencia de la gastritis. Te vamos a contar qué hay de cierto en eso.
Los cítricos son alimentos considerados como saludables. Estas frutas cuentan con una dosis significativa de vitamina C, nutriente clave para asegurar el buen funcionamiento del sistema inmune. Ahora bien, algunas personas evitan su consumo puesto que existe la creencia de que comer cítricos provoca gastritis.
Para comenzar, hay que destacar que la gastritis no suele presentar un componente dietético como factor de riesgo, sino que más bien está generada a partir de una colonización por bacterias patógenas. Otra de las causas es el daño en el tejido del estómago, lo que genera mayor sensibilidad a los ácidos.
Los cítricos no causan gastritis
El consumo de cítricos como tal no es capaz de generar gastritis. De hecho, estos alimentos podrían servir como base de tratamiento dietético para el helicobacter, uno de los microorganismos que origina el problema. Así lo evidencia una investigación publicada en la revista Evidence-Based Complementary and Alternative Medicine.
Ahora bien, sí que es cierto que si se experimenta una alteración del epitelio digestivo, ingerir una cantidad excesiva de cítricos podría incrementar los síntomas. Esto viene dado por una alteración del pH del medio estomacal hacia valores más ácidos, lo que provoca cierta irritación.
De todos modos, no a todas las personas con gastritis los cítricos les sientan mal. Existe una variación individual importante y ciertos factores pueden afectar.
Por este motivo, se recomienda comprobar la tolerancia en estos casos antes de retirar definitivamente tales alimentos de la dieta. Hay que tener en cuenta que la vitamina C que contienen es capaz de mejorar la regeneración del tejido a partir de un aumento en la síntesis de colágeno.
Cítricos y reflujo
Lo que sí pueden provocar los cítricos es un incremento del reflujo, es decir, de la sensación de subida de los ácidos a través del esófago. No obstante, esta condición no siempre tiene lugar en pacientes con gastritis. Es cierto que resulta molesta y que puede influir sobre la calidad del sueño, ya que se experimenta sobre todo de noche.
Asimismo, padecer reflujo de forma frecuente podría terminar por condicionar un cambio en el epitelio del tubo digestivo, afección conocida como esófago de Barret. En algún momento se asoció este alteración con un mayor riesgo de desarrollar cáncer.
Sin embargo, según las últimas investigaciones, esta relación no está del todo confirmada. Aun así, los expertos postulan que podría provocar un incremento de la incidencia del adenocarcinoma, como señala un estudio reciente.
En estos casos de reflujo frecuente, sí que podría ser preciso limitar el aporte de ácidos por medio de la dieta. La suplementación con probióticos y evitar colocarse en posición horizontal justo después de comer también pueden desencadenar una mejoría. Ahora bien, en ocasiones será preciso recurrir al tratamiento farmacológico para el control de los síntomas más agudos.
Los cítricos y su función recuperando el epitelio
Como hemos comentado anteriormente, los cítricos son un grupo de alimentos caracterizados por la presencia de vitamina C en su interior. Este compuesto, junto con la vitamina A, estimula la síntesis de colágeno, la proteína más abundante en el cuerpo humano. Gracias a ella, se podría experimentar una regeneración del tejido estomacal, en el caso de que este sea el motivo de la gastritis.
De todos modos, es importante destacar que las afecciones estomacales suelen estar ligadas al desarrollo de hábitos tóxicos, como el tabaquismo o el consumo de alcohol. Evitar la introducción de dichos elementos en las rutinas conseguirá una prevención realmente eficiente. En el caso de experimentar una colonización por helicobacter, lo mejor es acudir al médico cuanto antes para poner en marcha un tratamiento con antibióticos.
El consumo de cítricos no está relacionado con la gastritis
Según hemos comentado, el consumo de cítricos no provoca un incremento en la incidencia de la gastritis. Simplemente puede influir sobre la sensación de reflujo cuando este se experimenta de forma frecuente, así como aumentar los síntomas. Muchas veces una hernia de hiato es la causa de este último problema.
No obstante, si sufres dolor o ardor de estómago de forma frecuente, lo mejor es consultar con un especialista. Acto seguido, será buena idea acudir al nutricionista para optimizar la dieta e introducir alimentos con capacidades antiinflamatorias y regenerativas. De este modo, se acelerará el proceso de recuperación.
Fuente: Mejor Con Salud
