El mundo de los videojuegos, o el gaming, es una industria que tiene aproximadamente medio siglo de historia. En la década de los 70 se introdujo en el mercado la piedra angular de lo que más adelante sería un negocio multimillonario en la cultura del entretenimiento, el atari, y desde entonces el universo de los juegos de computadora y consolas no ha dejado de crecer, al punto que se estima que en el mundo hay por lo menos 3.100 millones de gamers (jugadores), según cifras de la compañía de análisis de mercado DFC Intelligence.
En medio de este universo, que entretiene tanto a grandes como a chicos, Suecia se ha convertido en la cuna de grandes marcas como Mojang Studios, la compañía detrás de Minecraft; EA Dice, conocida por desarrollar Battlefield y Mirror’s Edge; o King, propietaria de éxitos como Candy Crush o Pet Rescue.
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De acuerdo con el Game Developer Index 2021, en el país escandinavo hay 667 empresas dedicadas a este negocio que emplean alrededor de 6.600 personas.
Además, se estima que la industria de desarrollo de videojuegos genera cerca de US$3.500 millones en ingresos anuales a esa nación; el 10% de estos provienen de compañías ubicadas en Skövde, una ciudad que tiene 40.000 habitantes y que se ha convertido en un hub del negocio. Esta población se encuentra a una hora de Gotemburgo y a dos horas de Estocolmo.
Marcus Toftedalh, investigador y docente de videojuegos de la Universidad de Skövde, quien está culminando un PhD en esta área, destaca como la ciudad se ha consolidado en la última década como un foco para que los jóvenes ingresen y se desarrollen en esta industria. “Especialmente para videojuegos que solemos llamar indie-games, pequeños estudios que hacen juegos de nicho. Tenemos estudiantes que han tenido como sueño de vida de convertirse en desarrolladores de videojuegos, y gracias a la colaboración entre la universidad, nuestra incubadora y alcaldía de Skövde podemos proveerles un ambiente en el que se puede cumplir ese sueño”, explica el investigador.
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La universidad tiene ocho programas de pregrado en diferentes áreas enfocados en el desarrollo de videojuegos, que van desde diseño y programación, hasta arte enfocada en animación, o escritura narrativa o música, y cuatro programas de maestría dictados en inglés.
Se estima que la industria de desarrollo de videojuegos genera cerca de US$3.500 millones en ingresos anuales a esa nación
COOPERACIÓN LOCAL
Gracias al esfuerzo institucional conjunto nació en Skövde Swedish Game Arena, un proyecto de colaboración entre la universidad, la alcaldía y la comunidad científica en el área, cofinanciada con recursos regionales, para fomentar y fortalecer la industria de los videojuegos en la región. Esta incubadora apoya las ideas de negocio de los jóvenes, o a quienes quieren iniciar su propia compañía, y los asesora con los requerimientos legales y en relación con la creación de los negocios.
Algunos de los títulos que han nacido de esta simbiosis institucional son Valheim, un videojuego de supervivencia desarrollado por Iron Gate Studio lanzado en febrero de 2021. También Skövde es hogar de la start up Coffee Stain Studios, detrás de los juegos de acción Goat Simulator y Satisfactory, un videojuego de simulación cuyo objetivo es la construcción de fábricas y exploración de mundo abierto.
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Tau Peterson, cofundadora de Stunlock Studios, lanzó su primer videojuego a los 23 años, y desde entonces ha estado involucrada no solo con la compañía, sino también con la incubadora. “Es una industria fresca y relativamente nueva, pero se está moviendo muy rápido. Nosotros lanzamos nuestro primer videojuego en 2011, pero desde entonces hemos visto un crecimiento importante en la industria y un cambio en el modelo del negocio”, dice.
Peterson asegura que detrás del éxito de los suecos en esta industria hay varias razones. “Somos buenos haciendo videojuegos, algunas de las mayores compañías a nivel global están acá, y creo que una de las razones es porque la mitad del año estamos en invierno y estamos adentro, pero además, hemos sido muy progresivos en constituir un sistema digital. En los 90 el gobierno subsidió compras de computadores para todos los ciudadanos, lo que hacía posible tener un computador en casa, y luego, con la llegada del internet, el gobierno lanzó un plan para que todas las personas pudieran tener conexión”.
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Suecia se ha abierto al mundo para fortalecer su industria, y estudiantes y desarrolladores de diferentes nacionalidades también han encontrado en Skövde un lugar para crecer. Como es el caso de Paula Cal, animadora argentina que actualmente trabaja en Palindrome, una empresa de tamaño mediano que se enfoca en juegos de estrategia. “Esta es una carrera medio nueva, en mi país es algo similar, pero no hay una industria de videojuegos, por eso estoy acá”.
LAURA LUCÍA BECERRA
Fuente: Portafolio
