El presidente Joe Biden mantuvo este lunes a Jerome Powell al frente de la Reserva Federal de Estados Unidos para un segundo mandato, en el que seguirá liderando la respuesta a los daños económicos causados por pandemia mientras lidia con una inflación récord.
El nombramiento, que se espera que sea confirmado por el Senado, pone fin a semanas de especulaciones sobre si Biden, un demócrata, volvería a nombrar en la presidencia al republicano, o si escucharía al ala izquierda de su partido para sustituirlo por la gobernadora de la Fed, Lael Brainard.
Finalmente Brainard será vicepresidenta del banco central más influyente del mundo, dijo Biden, mientras que Powell permanecerá al frente del proceso de reducción de estímulos decretados por la pandemia y el probable comienzo de las subidas de los tipos de interés el próximo año.
“No podemos simplemente regresar a donde estábamos antes de la pandemia, necesitamos reconstruir mejor nuestra economía”, afirma Biden en un comunicado.
“Estoy seguro de que el enfoque del presidente Powell y de Brainard de mantener la inflación baja, los precios estables y lograr el pleno empleo hará que nuestra economía sea más fuerte que nunca”, añade.
Powell ha liderado la respuesta del banco central a la recesión provocada por la pandenmia, lo cual implicó reducir la tasa de préstamos a cero e inyectar billones de dólares de liquidez.
El banco ha retirado esos respaldos a medida que la economía se va recuperando, pero la inflación también se ha disparado, lo que ha provocado una caída en los índices de popularidad de Biden en las encuestas.
Powell también lideró un cambio en la política de la Fed para mantener las tasas de interés más bajas durante más tiempo de lo normal para estimular el pleno empleo, particularmente para las minorías y los grupos que a menudo están en desventaja.
El presidente de la Fed y otros líderes del banco central argumentan que la inflación será temporal y no prevén subidas de las tasas de interés al menos hasta mediados del próximo año.
“La reelección de Powell y el nombramiento de la gobernadora Brainard no son una sorpresa sino una señal de continuidad en el banco central”, estima Rubeela Farooqi de High Frequency Economics.
“En general, con Powell en la presidencia, la comunicación seguirá siendo clara y transparente y la política no se desviará demasiado de la actual senda moderada”.
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– Gastos a la vista –
Powell, de 68 años, fue nombrado por Donald Trump en 2018, cuando el entonces presidente decidió no darle a la demócrata Janet Yellen un segundo mandato.
Yellen es ahora la secretaria del Tesoro de Biden, pero ha hablado bien de la presidencia de Powell en los últimos meses, aunque sin respaldar a ningún candidato.
“En los últimos años, el presidente Powell ha brindado un fuerte liderazgo en la Reserva Federal para enfrentar y abordar de manera efectiva desafíos económicos y financieros inesperados”, afirma en un comunicado después del anuncio.
Powell debe ser confirmado por el Senado, que los demócratas de Biden controlan estrechamente, aunque los analistas predicen que recibirá una serie de votos de los republicanos de la oposición, como el de Mitt Romney.
Biden se ha centrado en obtener la aprobación del Congreso para un gigantesco proyecto de ley de bienestar social que gastaría 1,8 billones de dólares en 10 años.
Para conseguirlo necesita los votos de casi todos los demócratas y nombrar a un presidente de la Fed capaz de adoptar una línea más dura sobre los bancos y el cambio climático podría considerarse una forma de generar apoyo entre los progresistas. Brainard, la única demócrata de la junta de gobernadores del banco central, era considerada la persona idónea para ello.
– “Poca diferencia” –
Sin embargo, Jay Bryson, economista del banco corporativo y de inversión Wells Fargo, estima que en lo que respecta a las principales decisiones de la Fed, como cuándo subir las tasas de interés, el nombramiento de Brainard posiblemente no hubiera cambiado gran cosa.
Brainard también necesita la luz verde del Senado y si la confirman como vicepresidenta reemplazaría al republicano Richard Clarida.
Biden tendrá otras ocasiones para remodelar la institución monetaria.
Hay otros tres puestos vacantes en la junta de gobernadores de la Fed, incluido el de vicepresidente de supervisión, una especie de policía bancario, puesto que hasta hace poco ocupaba el republicano Randal Quarles.
Biden dará a conocer los nombramientos a principios de diciembre y “está comprometido a mejorar la diversidad en la composición de la Junta”, informó la Casa Blanca.
Fuente: El Nuevo Siglo