A escasas semanas de que se cumplan dos años de la aparición del covid-19 en el mundo, cuyo origen y transmisión al humano continúa en el misterio, una investigación científica devela cuál fue el primer caso conocido, lo que en epidemiología se define como el paciente cero.
El estudio de Michael Worobey, experto de la Universidad estadounidense de Arizona en evolución del virus indica que fue el de una pescadera del mercado mayorista de mariscos de Huanan, en la ciudad de Wuhan, quien enfermó el 11 de diciembre de 2019.
Basándose en los registros sanitarios, los datos genómicos y epidemiológicos de los primeros días del covid-19, este científico estadounidense elaboró una imagen detallada de los primeros acontecimientos que desembocaron en esta pandemia que, inéditamente, confinó por meses al mundo y que lo sigue azotando con un virulento rebrote en algunas regiones, como en el Viejo Continente.
De acuerdo con su análisis, que acaba de ser publicado por la prestigiosa revista Science, esta vendedora de mariscos enfermó de covid-19 la mencionada fecha y ese mismo día informó a las autoridades sobre varios posibles casos que como el suyo había en clínicas y hospitales que estaban cerca del mercado de Huanan.
Junto a esto, Worobey descubrió una discrepancia en el informe de China y la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre el origen de la pandemia. Según este documento, un paciente sin conexión con el mercado había sido considerado el caso más temprano conocido del coronavirus, al haber presentado síntomas el 8 de diciembre de 2019.
Sin embargo, este nuevo estudio ha evidenciado que ese paciente en realidad no presentó los síntomas hasta una semana después, el 16 de diciembre de 2019, lo que “cambia drásticamente el cuadro presentado por el informe de China y la OMS” y hace que esta pescadera de Huanan se convierta en el primer caso conocido.
“El caso del 8 de diciembre ha sido utilizado por los defensores de la teoría de que el virus salió de un laboratorio para argumentar que el SARS-CoV-2 no pudo haber surgido en el mercado, ya que el caso más temprano no tuvo exposición allí. Además, le llevó a afirmar que la pandemia comenzó en las instalaciones del Instituto de Virología de Wuhan, ya que esas están cerca de donde esta persona vivía y compraba. Pero está claro que este paciente enfermó después de que se notificaran los primeros casos en Huanan, por lo que el virus ya circulaba en ese momento”, explica Worobey.
La fuente ‘más probable”
Así, a través de un análisis metódico, aporta pruebas que disipan la teoría de que el virus se filtró desde un laboratorio de investigación. Worobey considera, de hecho, que la fuente “más probable” del origen del coronavirus es el mercado de Huanan.
Este nuevo estudio detalla que allí y en otros tres mercados de animales vivos de Wuhan se vendían mamíferos vivos susceptibles de contraer coronavirus, incluidos perros mapaches, inmediatamente antes de la pandemia. Igualmente, informa de que durante el primer brote de SARS se encontraron virus similares al coronavirus en perros mapaches, lo que se vio facilitado por las interacciones entre animales y humanos en los mercados de animales vivos de China.
Worobey se propuso resolver varios eventos cruciales que tuvieron lugar en diciembre de 2019 y enero de 2020: “La cuestión que quería abordar era si la aparente conexión de los primeros casos con el mercado de Huanan era real o solo un espejismo, porque allí es donde la gente buscaba los casos”.
Para ello, el investigador se imaginó un escenario: “Como el primer brote de SARS de 2002-2003 se asoció a animales vendidos en mercados húmedos, había un sistema en el que cada vez que un médico se encontraba con un paciente con neumonía, le preguntaba si trabajaba en un mercado húmedo, y si lo hacía, ese caso quedaba registrado como algo muy interesante. Pero si una persona se presentaba con síntomas idénticos, pero respondía negativamente a esa pregunta, no se registraba como caso”.
En este escenario, el investigador explica que sería hipotéticamente posible acabar con una ciudad como Wuhan, con una población de 11 millones de personas, en la que 50 casos de infecciones tempranas por covid-19 aparecieran vinculados al mercado, mientras que, al mismo tiempo, podría haber 10.000 casos que pasaran desapercibidos en el resto de la ciudad.
Al aclarar que fueron los médicos, y no los epidemiólogos, quienes descubrieron por primera vez a los pacientes de covid-19, Worobey demuestra que los casos con antecedentes de exposición en el mercado de Huanan no pudieron ser “seleccionados” antes de que nadie hubiera identificado el mercado como un factor de riesgo epidemiológico. Por lo tanto, defiende que “hubo una verdadera preponderancia de casos tempranos de COVID-19 asociados con el mercado de Huanan”.
De la misma forma, agrega que dado que el mercado tiene el tamaño de un campo de fútbol en una ciudad de 11 millones de habitantes “sería difícil explicar el patrón de infecciones tempranas allí si la pandemia no comenzara en el mercado cuando un virus se cruzara desde un animal vendido a una persona”.
“Es importante recordar que, dado que sólo alrededor del 7 por ciento de las infecciones por SARS-CoV-2 conducen a la hospitalización, la mayoría pasan desapercibidas, lo que significa que no debemos esperar que los primeros pacientes detectados sean los primeros infectados o estén relacionados con el mercado de Huanan. La forma en que se desarrolló la pandemia de COVID-19 parece ser básicamente una repetición directa del brote epidémico original de SARS”, indica.
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Alerta de OMS
Entre tanto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó sobre la posibilidad de que el resurgimiento de la pandemia de coronavirus en Europa provoque 700.000 muertos adicionales de aquí a marzo si la tendencia actual continúa, lo que elevaría el total de decesos a 2,2 millones en la región.
Según explicó “cabe esperar” que los servicios de cuidados intensivos se vean bajo presión alta o extrema “en 49 de los 53 países que componen la región Europa de aquí al 1 de marzo de 2022” y que “los muertos acumulados contabilizados superen los 2,2 millones hasta la primavera”.
Actualmente, en la región han muerto 1,5 millones de personas debido al covid-19.
Para la OMS, el aumento de los casos se explica por la combinación de tres factores: la virulencia de la variante delta, muy contagiosa, la vacunación insuficiente y una flexibilización de las restricciones sanitarias.
Según cifras oficiales, las muertes vinculadas al coronavirus se han duplicado desde finales de septiembre y pasaron de 2.100 al día a cerca de 4.200, en promedio en la región Europa.
“La situación en Europa y Asia central es muy seria. Nos enfrentamos a un invierno lleno de desafíos”, dijo el director para Europa de la OMS, Hans Kluge, pidiendo que a la vacuna se sumen medidas de prevención como el uso de la mascarilla, la higiene y la distancia física.
Según la OMS, el uso de la mascarilla reduce en un 53% la incidencia de la enfermedad. Si su utilización fuera generalizada se podrían evitar más de 160.000 muertes hasta el 1 de marzo, según la Organización, que recomendó también una dosis de refuerzo de la vacuna anticovid para aumentar su eficacia.
“En conjunto, llevar una mascarilla, lavarse las manos, ventilar los espacios interiores, mantener la distancia física y estornudar en el codo son formas sencillas y eficaces de controlar el virus y mantener las sociedades”, destacó.
La OMS cuenta con 53 países en la región europea, incluyendo no sólo la UE sino también países más al este como Rusia, Ucrania y Turquía. Hasta el momento, el 53,5% de la población de la región está totalmente vacunada, pero hay grandes diferencias entre los distintos países, como en Alemania y Austria cuyo registro es del 70% de la población inmunizada, mientras que las otras naciones ya superan el 75%.
Es por ello que la estrategia sanitaria se enfoca ahora en los ‘no vacunados’, miles de personas que por una variopinta de motivos rechaza la inmunización contra el covid y que, ante el restablecimiento de algunas medidas, que van desde el confinamiento forzoso hasta la prohibición para entrar a lugares y eventos públicos, han protagonizado manifestaciones, muchas de las cuales degeneraron en disturbios. /Redacción internacional con Europa Press
Fuente: El Nuevo Siglo