A toda maquinaria trabajan para limpiar los restos del que fuera propiedad de Pablo Escobar.
Cuatro retroexcavadoras, tres de ellas dotadas con martillos hidráulicos para resquebrajar en piezas más pequeñas los grandes bloques de cemento y metal, y otra con una pala para recoger y depositar en volquetas doble troque los escombros que dejó la Implosión del edificio Mónaco el pasado 22 de febrero, es parte del panorama que se vive en el barrio Santa María de Los Ángeles, en El Poblado… Seguir leyendo